¿Será suficiente con la cuarentena o necesitaremos algo más?

La estrategia del Ejecutivo nacional es clara y puso todas las fichas en una medida de las más extremas, que tiene efectos durísimos desde lo económico, pero que resulta efectiva de acuerdo a lo que se pudo ver en las experiencias alrededor del mundo.

Sin embargo, quizás más importante que la cuarentena será el período que se iniciará después del 12 de abril cuando vuelvan a la actividad una serie de rubros y en parte el país y su economía comiencen a retornar lentamente a la normalidad.

Técnicamente hoy estamos alejados del virus porque no circulamos, pero cuando eso cambie habrá convivencia con el Covid-19. Entonces, la pregunta es si en ese momento la Nación y las provincias estarán en condiciones de realizar test masivos para detectar los casos, aislarlos, y también encontrar los casos asintomáticos, el peligro que enfrentan hoy los países que llegaron a "controlar" la expansión del coronavirus.

Esto último es importante, porque en otros lugares del mundo se están considerando en la estadísticas oficiales a las personas que se le realizan test que resultan positivos sin tener ningún síntoma. Al aislamiento, en algunos lugares se suma la realización masiva de análisis para detectar estos casos y aislarlos.

En la Argentina hoy no se hacen test masivos, sólo se estudia a las personas que presentan síntomas y la cantidad de análisis que se están realizando está muy por debajo de lo que tienen en promedio las naciones que están apostando a esa estrategia.

De acuerdo a los datos de la Universidad Johns Hopkins de Estados Unidos (cuyo mapa del virus se ha vuelto referencia en la emergencia) y según publica Emol, Chile ha hecho 1.800 exámenes por millón de habitantes desde el inicio de la pandemia, seguido de cerca por Panamá, con 1.600 por millón. En cambio, naciones como Ecuador y Perú suman 400 por millón, Brasil 300, y Argentina y México aplican menos de 200.

Por eso a la hora de las estadísticas en Chile suman más de 4.000 casos y diariamente registran más de 400 nuevos positivos, debido a la realización de casi 50 mil testeos en medio de la emergencia.

Todos los especialistas coinciden y no hay discusión respecto a la efectividad de la cuarentena, pero una vez que ésta se vaya flexibilizando y con circulación del virus, además de los cuidados que deberán tener los propios ciudadanos, se apunta a la necesidad de realizar más testeos, especialmente ahora que la preocupación de los países que van en la parte descendente de la curva son los casos asintomáticos.

China, por ejemplo, comenzó a publicar la evolución diaria de los casos que no presentan síntomas de covid-19, porque podría complicar las tendencias a la baja de la enfermedad debido a que son personas que están contagiando sin saber que son portadores del virus.

La epidemióloga de la OMS, Maria van Kerkhove, dijo hace algunos días en Ginebra que los pacientes con síntomas eran los principales impulsores de la transmisión en la mayoría de los casos, mientras que la mayoría de los clasificados como asintomáticos desarrollaban síntomas a los pocos días del diagnóstico. 

Entonces, con el paso adelante que se dio al realizar el aislamiento se presupone que hay una ventaja frente al avance del virus, pero también se pone sobre la mesa la cuestión de los testeos, su cantidad y su forma de realización. 

Aún queda una semana de cuarentena total y las dudas surgen respecto a lo que será cuando termine y comiencen a flexibilizarse, especialmente después del caos que se vio el viernes en los bancos, una imagen que no se puede volver a repetir cuando termine el confinamientos si el objetivo es convivir con el Covid-19 y evitar que colapse el sistema de salud.