El Gobierno ratificó la desadjudicación de una casa del IPV y sentó posición: "La vivienda es para quienes la habitan"
El decreto 2550 confirma la quita de una propiedad social en Capital: la familia perdió la casa por incumplir la regla central de habitarla, al admitir que residía en otro lugar.
El Ministerio de Gobierno, Infraestructura y Desarrollo Territorial de Mendoza, mediante el Decreto Nº 2550, confirmó la des-adjudicación de una vivienda social del Barrio Eusebio Blanco, sentando un claro precedente contra la utilización indebida de los inmuebles financiados por el Estado.
La medida recae sobre los ex adjudicatarios C. Martínez y C. Pajares, quienes perdieron los derechos sobre la unidad por un motivo contundente: nunca la habitaron.
La clave: falta de ocupación efectiva
La decisión se basó en el incumplimiento del Artículo 26 inciso b) del Decreto Provincial Nº 868/77, que exige la ocupación efectiva de la vivienda por parte del grupo familiar. El expediente reveló que la propia adjudicataria, Cristina Pajares, reconoció en actas notariales que el núcleo familiar reside en otro domicilio desde hace más de 15 años y que nunca tuvieron intención de vivir en la unidad del IPV.
Fuentes oficiales destacaron que la administración municipal actuó con rigor, utilizando denuncias vecinales, inspecciones y, de manera crucial, las propias declaraciones de los involucrados para demostrar el incumplimiento.
Reproche legal a la "conducta contradictoria"
El Decreto 2550 subraya el principio de la "doctrina de los actos propios", que impide a un sujeto contradecir una conducta previa. "Nadie puede volver sobre sus propios actos sin merecer el reproche correspondiente", señala el texto, calificando los argumentos de los recurrentes como "argucias procesales que rozan la mala fe" ante la contundencia de la prueba.
Si bien se analizó una causal de incumplimiento de pago (mora en cuotas), la Asesoría de Gobierno desestimó este punto ya que la deuda había sido regularizada mediante un convenio al momento de la des-adjudicación original. Sin embargo, la falta de ocupación fue considerada una infracción "por excelencia y definitorio" que justifica plenamente la medida.
Cómo son los departamentos del IPV
Los departamentos tienen estar-comedor, cocina-lavandería, dos dormitorios y un baño. Las paredes están terminadas con yeso, las divisiones interiores son de tabiquería liviana tipo durlock, y los pisos y revestimientos son de cerámica. Las puertas interiores son placas de madera, las de ingreso son de chapa inyectada, y los baños están completamente equipados. La cocina cuenta con mesada de granito y pileta de acero inoxidable, mientras que la lavandería tiene pileta de PVC, griferías y aberturas de aluminio blanco.
