El grupo dueño de Havanna ganó terreno en la puja por dos represas del Comahue

Edison Inversiones presentó las ofertas más altas en el repechaje y quedó al frente en dos de las cuatro centrales hidroeléctricas en proceso de concesión. El Gobierno confirmó ingresos por más de US$700 millones y avanza hacia la adjudicación final.

El Gobierno dio un paso clave en la licitación para concesionar las cuatro represas del Comahue y confirmó que recaudará alrededor de US$706 millones. La Secretaría de Energía informó que Edison Inversiones -grupo vinculado a empresarios como Rubén Cherñajovsky, Luis Galli y los socios de Inverlat, controlantes de Havanna- mejoró su propuesta en la ronda de desempate y terminó imponiéndose en dos complejos hidroeléctricos.

El proceso contempló la venta del 100% de las sociedades estatales creadas para operar las represas Piedra del Águila, El Chocón, Alicurá y Cerros Colorados, aunque las centrales continuarán siendo patrimonio público. Las concesiones tendrán una duración de 30 años.

Desde diciembre, se privatizarán 4 centrales hidroeléctricas de Neuquén

En Piedra del Águila, Central Puerto presentó la oferta ganadora con una propuesta de US$245 millones y seguirá al frente de la central. En Alicurá, Edison Inversiones presentó una oferta de US$162 millones y desplazó a la estadounidense AES, que no logró igualar ese monto.

En El Chocón, la mejor propuesta fue la de BML Inversora -vinculada al grupo MSU Green Energy del empresario Manuel Santos Uribelarrea- con US$235,7 millones, superando a la italiana ENEL, que operó la represa en los últimos años.

La definición más disputada ocurrió en Cerros Colorados (Planicie Banderita). Aunque BML había liderado inicialmente, no cumplía con el margen exigido para adjudicarse dos centrales. En el repechaje, Edison elevó su oferta a US$64,1 millones, superó a su competidor y pasó al primer lugar.

Las centrales, ubicadas sobre los ríos Limay y Neuquén, suman una capacidad instalada de 4170 MW, cerca del 10% de la generación eléctrica del país. El esquema fijado en el pliego prevé que la energía producida se comercialice en parte de forma regulada y, de manera creciente con los años, en el mercado libre. A partir del año 21, toda la producción podrá venderse sin restricciones.

Río Negro y Neuquén recibirán regalías del 12% sobre el precio de venta, más un canon provincial del 2% por el uso del recurso hídrico.

El desafío futuro será la modernización de infraestructuras envejecidas. El Chocón, inaugurado en 1973, requiere inversiones significativas para garantizar operación segura y eficiente, una condición clave para quienes resulten adjudicatarios en esta nueva etapa.

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