Desde Aclisa advierten que el cierre de clínicas "no es una posibilidad lejana"

En la jornada de ayer se conoció un comunicado de la Asociación de Clínicas y Sanatorios (Aclisa) en donde se manifestó la imposibilidad de poder afrontar los salarios debido a la situación que atraviesa el sector. El coordinador médico de Aclisa, Rodolfo Torres, habló con "Tenés que saberlo", por Radio Jornada 91.9, y explicó el difícil momento que viven.

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"Las clínicas estamos atravesando una situación crítica que no es de ahora, sino que viene de varios años y en los últimos 112 meses ha sido catastrófica la relación de ingreso y egreso que ha tenido la clínica", señaló Torres, y agregó: "Estamos inmersos en el mismo lío económico que tenemos todos y las misma inflación en lo que son gastos normales".

Torres explicó que las clínicas en algunos aspectos funcionan como hoteles y que, a la inflación cotidiana para dar de comer a pacientes y acompañantes, se suma la específica del sector de la salud: "En algunos casos llega al 2300%, en otros promedia el 600% y en otros fue del 300% de un mes al otro. Eso se suma a los acuerdos paritarios, que se concretaron el 27 de febrero pero se hicieron vigentes para el mes de febrero. Es muy difícil afrontar los salarios más el aumento paritario y seguir estando operativos con todo el desbarajuste de costos que se ha generado", marcó.

El coordinador médico de Aclisa señaló que las clínicas no han dejado de atender obras sociales, a excepción de aquellas que tienen falta de pago cercano a los seis meses: "Lo que se ha resentido, que no depende de las clínicas sino de las asociaciones médicas, es la atención en consultorio. Las asociaciones deciden suspender determinada obra social si no alcanza el valor mínimo que exigen", explicó. Además, marcó que las obras sociales pagan lo que consideran en el tiempo que consideran y esto lleva a retrasos de entre 60 y 150 días: "Hacen que se genere un caos financiero en el que las clínicas están cada vez más comprometidas y es muy difícil que sigan operando en esta situación".

Torres señaló que de 200 mil internaciones que genera la provincia, 93 mil son atendidas por el sector público de salud: "La salud pública de Mendoza no puede atender a toda la población, ni en Mendoza ni en Argentina. No puede haber una salud pública y una privada, hay un sistema de salud que tiene que se tiene que encargar de brindar salud a todos los mendocinos. Que tiene un efector público y uno privado es así, pero uno no puede existir sin el otro".

En referencia a las paritarias, Torres señaló que se ha pedido una mesa de diálogo con los gremios y el gobierno para solucionar la situación: "No decimos de no pagar la paritaria, porque es un aumento que se merece: los trabajadores de la salud están capacitados y comprometidos. Lo que necesitamos es tiempo para poder lograr tener los recursos y poder afrontar esto. Parte de eso son los financiadores, que tienen que achicar los plazos para que la clínica tenga los recursos", explicó.

Finalmente, el coordinador de Aclisa explicó que no se pueden realizar recortes en salud, debido a que se trabaja con márgenes de seguridad muy altos: "Es como tener un avión y querer despegar con una turbina: se puede pero no se hace porque es inseguro. La clínica tampoco opera sino tiene los insumos necesarios no solo para lo que necesita resolver en el acto quirúrgico, sino todas las complicaciones que puedan surgir. En medio de una cirugía no se puede ir a comprar algo", explicó, y añadió que si no están las condiciones de seguridad, no se opera: "Hay muchos efectores en situaciones complejas y el cierre de clínicas no es una posibilidad lejana".