Entrevista

Incivilidad: el problema que atraviesa hoy la comunicación política

El consultor y analista político Rubén Zavi habló sobre la realidad que atravesamos hoy en día con diferentes "tribus" en redes sociales y la forma en la que la comunicación política interpreta este nuevo paradigma.

Periodista y escritor, autor de una docena de libros de ensayo y literatura. En Twitter: @ConteGabriel

La irrupción de las redes sociales y las posibilidades de comunicación "on demand" han transformado la lógica de la comunicación política en estos últimos años. El analista y consultor político Rubén Zavi habló con Gabriel Conte, Ana Belén Martínez y Ariel Fernández Lavilla en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y analizó las diferentes maneras de observar la nueva realidad a la cual se encuentra sometida esta comunicación en un mundo fragmentado por diferentes "tribus" y atravesado por la "incivilidad".

"Este término que acuña Mario Riorda, y que también lo toma de la bibliografía estadounidense con el advenimiento de Trump, este tribalismo, o tribalismo tóxico, en donde estas personas o la gente que empieza a regir en las redes sociales empiezan a tener unas burbujas informativas, donde se refugian las personas con distintos ideologías o pensamientos, no solamente en lo político, sino en distintos tipos de culturas, y ahí es donde tomamos estos términos con algunas cuestiones que son negativas, que es la incivilidad: mucha gente no se está respetando en estos medios, en las redes sociales", señaló Zavi.

El consultor político realizó un repaso histórico y marcó que antes leer un diario, escuchar la radio o ver la televisión era lo más importante para poder informarse, pero eso cambió: "Ya en el 2018, 2020, empieza este ecosistema digital con redes, en donde el diario se transforma en diario digital, en donde la radio empieza a transformarse en estos nuevos medios ‘on demand', la TV también ‘on demand', y no tenemos a este portero que necesitaba la gente ‘pasamos primero al periodista para luego comunicar', ahora la gente, con total democracia dicen algunos autores, empiezan a publicar en las redes sociales".

Zavi explicó que la gente opina lo que quiere y que estas burbujas las lee quien quiere y puso como ejemplo casos puntuales que se disparan por las redes, como es el caso de las inundaciones en Bahía Blanca: "También están las fake news, entonces ahí es donde quienes quieren informar bien, empiezan a caer en medios de la comunicación sinceros y hay mucha gente que no. Directamente los más jóvenes que quizás caen en estas redes sociales como TikTok o Instagram dicen ‘lo que yo estoy leyendo es verdad' y no corroboran la veracidad de esta noticia falsa".

A su vez marcó que algunos autores hablan de un periodismo "de tres almas": "Hay unos que se llevan netamente por lo económico, que por ganar dinero publican lo que sea, hasta las encuestas; otros con el alma política, que es con una orientación totalmente definida y que en Argentina es hoy más que nunca una de las cuestiones que se están discutiendo; y la profesional, que es el de investigación, que son aquellos periodistas que son indiscutidos y que en Argentina también los hay. Creo que en ese punto hoy la comunicación, tanto política o la que sea, está en una cierta crisis, que esta crisis está yo creo hoy por las redes sociales. Este ecosistema digital que hoy estamos viviendo ¿es negativo? No, yo creo que no, es más democrático. Sí tenemos que ver hacia dónde ir, hacia dónde corroborar los datos".

Además, señaló que los diarios más populares del país han ido perdiendo difusión, además de marcar que los periodistas suelen estar mal pagos y eso genera que muchos se muevan únicamente por lo económico: "Este tribalismo es un desafío en la política. Fernández Pedemonte habla de estas burbujas informativas en donde hoy para los consultores políticos es muy difícil llegar a todas esas tribus: hay tribus de todas las formas y sentidos, no solamente esta grieta o segmento o polarización que hay dentro de la política que es blanco o negro, hay millones porque están los ambientalistas, los que les gusta cierto tipo de música. Cuando uno empieza a asesorar a un político, antes era fácil: vos ibas a un medio de comunicación y con eso, listo".

Zavi comentó que Trump enviaba múltiples mensajes destinados a distintas personas por diferentes medios y eso es una muestra de la forma en la que se ha segmentado la sociedad: "Por eso los políticos hoy, vamos a verlo por todos lados, van a tender a polarizar: todo lo que no sea yo, es lo malo. Ellos empiezan a segmentar a su público, empiezan a definir cuál es su público, porque saben que el público que no los vota, es imposible que los vote, porque son otra tribu, porque no los van a leer y porque tampoco en las redes sociales se van a cruzar. Eso es lo que un poco Durán Barba habla cuando habla de ‘comunicación negativa': es destruir, hay que ver la forma directa o indirecta de destruir al adversario, ya sea por gente propia o por gente ajena. Destruyendo uno polariza, entonces se hacen más fácil llegar a todas las tribus que hoy tenemos a nivel mundial y a nivel Argentina".

A su vez, marcó que lo que más preocupa en la comunicación es la incivilidad que estamos viviendo en la Argentina: "Esta incivilidad que hoy estamos viviendo desde el presidente de la Nación hasta el resto de los dirigentes políticos: las últimas peleas que hemos visto en el Congreso, Caputo, no quiero nombrar dirigentes políticos porque acá en la Argentina hablar de dirigentes políticos es estar en la grieta de un lado o del otro, Cristina terminó la gestión de Alberto Fernández con un ‘fuck you' levantando la mano. Esta incivilidad también se ha visto antes, pero la ha marcado mucho Milei. Lo he hablado en otros artículos que hemos escrito en Memo: la incivilidad no nos lleva a nada, nos lleva a dividir más la sociedad, a mayor confrontación".

En esa línea, colocó el ejemplo del escándalo de $Libra: "Milei ahora para un sector de la sociedad es odiado y para otro sector de la sociedad es totalmente amado y no hubo ningún problema. Pero creo que esta incivilidad en la comunicación política no nos va a traer a una democracia más participativa, más plural. Como Alfonsín, que era una persona que se refugiaba en esto de ser una persona civilizada, de llamar a la oposición, de llamar al diálogo. Eso hoy en el mundo y en la Argentina no está pasando. La gente no lo reclama, es una de las realidades porque empezamos con estas burbujas informativas: yo me informo de lo que yo quiero, estoy del lado de la grieta que yo prefiero y no me voy a cruzar nunca con esta gente que opina diferente a mí. También, un poco psicológicamente hablando, es una tranquilidad emocional para no estar peleando todo el día con un lado u otro de la grieta"

Pensándolo en Mendoza, el consultor político señaló que comparando los últimos años, él ve a dos Cornejo distintos: "Hubo un Cornejo que al inicio de su gestión sí se animaba a hablarle a Macri frente a frente, un Cornejo que marcó siendo una persona exaltada por ahí muchas veces decían que a Mendoza le convenía o a la oposición también se le iba de frente porque había un peronismo que recién salía del gobierno y que, bien o mal, había gobernado y que también tenía que criticar fuertemente a lo que había sido el gobierno de Paco Pérez. Creo que la gente lo vota a Alfredo Cornejo por el hastío de cómo había quedado la provincia casi incendiada, se dio más que nada con los sueldos de los estatales que no los pudieron terminar de pagar".

Por otro lado, marcó que el Cornejo de hoy es uno sin oposición clara: "En Mendoza no hay un referente político que lo enfrente directamente a Alfredo Cornejo. En las últimas elecciones sí pudo haber en La Unión Mendocina quizás un poco más de ruido pero después en las elecciones la gente votó a Alfredo Cornejo y directamente desapareció. El opositor era Omar De Marchi, que termina muy cerca de Javier Milei y ya no podía hablar tanto porque Cornejo tampoco estaba muy desalineado con las políticas de Milei entonces deja de estar en escena política".

En esa línea, Zavi señaló: "Hoy Alfredo Cornejo se presenta más como estadista, como una persona de gestión con sus problemas, con las cuestiones económicas, con cuestiones que hoy en Mendoza se están viendo a nivel económico que no son directamente problemas de Mendoza, pero sí con temas de seguridad. Él se tiene que mostrar como una persona un poco más pasiva y también hoy enfrentar a Javier Milei para cualquier gobernador tampoco es fácil por esta incivilidad y bravuconada. Este tribalismo o incivilidad también está puertas adentro: sabemos que Javier Milei, cuando a la vicepresidenta de la Nación se quiso enfrentar a él, también tuvo ciertas cuestiones de incivilidad por redes sociales. Hoy enfrentarse a Javier Milei no es fácil y para un gobernador enfrentarse al presidente de la Nación con un federalismo que no es federalismo económico, donde muchos recursos dependen del presidente de la Nación, no es fácil", concluyó.

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