Economía

Caputo afloja la política monetaria y promete más liquidez para el crédito

Tras la derrota electoral en Buenos Aires, el equipo económico anunció una reducción de tasas y posibles cambios en los encajes para que los bancos puedan financiar a las empresas. El dólar cerró en torno a $1.445 y se mantiene cerca del techo de la banda cambiaria.

El Ministerio de Economía confirmó que iniciará un proceso de flexibilización monetaria con el objetivo de reactivar el crédito y aliviar la situación de las empresas, en especial las pymes. La decisión llega después de la derrota de La Libertad Avanza en las elecciones de la provincia de Buenos Aires.

Luis Caputo, acompañado por José Luis Daza y el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, detalló en una transmisión en vivo de "Carajo" que la estrategia será continuar con la baja de tasas y revisar algunas de las medidas que afectaron la operatoria bancaria.

Según explicaron, en los últimos días el mercado cambiario volvió a mostrar operaciones "con volúmenes normales", lo que permitió que ni el Tesoro ni el BCRA tuvieran que intervenir. "La semana pasada se cortó totalmente la oferta de divisas, pero ahora se están operando volúmenes normales y por eso no fue necesario dar liquidez", señalaron.

El Banco Central ya redujo en diez puntos la tasa de pases con las entidades financieras y también disminuyó el rendimiento de los bonos licitados el miércoles. Con un dólar oficial a $1.445 y un mayorista en $1.432, apenas por debajo del techo de la banda cambiaria de $1.460, los funcionarios consideran que existe margen para seguir bajando las tasas sin riesgo de un salto cambiario.

Bausili reconoció que las tasas "súper altas" de más del 60% anual generaron problemas de financiamiento: "Dijimos que el fuerte apretón monetario era transitorio y ahora vamos a una situación de mayor normalidad. Es cierto que las empresas se encontraron con situaciones complicadas por el fuerte aumento de las tasas y la escasez de pesos", afirmó.

Entre las medidas en estudio, se evalúa flexibilizar el nivel de encaje que hoy obliga a los bancos a inmovilizar más del 50% de sus depósitos en el BCRA. Según adelantó Bausili, habrá conversaciones con el sector en los próximos días para "facilitar su actividad cotidiana".

El nuevo rumbo apunta a reducir la presión sobre el sistema financiero, dar mayor liquidez a los bancos y asegurar que el crédito de corto plazo a las empresas no quede paralizado.

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