Expectativas

El Gobierno apuesta al apoyo de EEUU para contener la economía antes de las legislativas

Luis Caputo viajó a Washington para definir los términos del respaldo financiero del Tesoro norteamericano y preparar la visita de Milei a Donald Trump. El estancamiento económico, la presión cambiaria y las tensiones políticas complican la recta final antes del 26 de octubre.

En la recta final hacia las legislativas del 26 de octubre, el Gobierno argentino intenta recomponer su frente económico con la ayuda de Estados Unidos. El ministro de Economía, Luis Caputo, viajó a Washington con el objetivo de avanzar en las negociaciones por un eventual apoyo financiero del Tesoro norteamericano y dejar allanado el camino para la próxima visita de Estado del presidente Javier Milei a Donald Trump, que incluirá un encuentro en el Salón Oval de la Casa Blanca.

Desde abril, cuando se inauguró el sistema de bandas cambiarias -una medida que había sido presentada como un hito de gestión-, la economía comenzó a mostrar signos de agotamiento. Lo que en su momento fueron anuncios celebrados, como el respaldo político y económico de Washington a fines de septiembre, terminaron siendo respuestas defensivas frente a un escenario cada vez más complejo: una inflación persistente y una creciente inestabilidad financiera y cambiaria.

Un 2025 de crecimiento débil y señales mixtas

Aunque el Gobierno insiste en que el PBI de 2025 cerrará con un alza, los datos de actividad económica muestran otra realidad. Luego del repunte iniciado en mayo de 2024, la recuperación se detuvo hacia marzo-abril de este año y la economía se mantuvo prácticamente estancada durante gran parte del ejercicio. Es un contraste con lo ocurrido en 2024, cuando el PBI cayó por el impacto inicial del ajuste, pero la actividad mostró una mejora sostenida en la segunda mitad del año.

La diferencia entre las cifras anuales y el pulso real de la economía es clave para el clima social. Según el Índice Compuesto de Actividad Económica de Argentina (ICA-ARG), elaborado por el Centro de Investigaciones sobre el Ciclo Económico de las Bolsas de Comercio de Rosario y Santa Fe, la actividad registró en agosto una variación mensual casi nula (0,01%). El leve avance cortó tres meses consecutivos de caídas, aunque los gráficos del índice siguen dominados por el color rojo, reflejo de la fragilidad del escenario.

En términos interanuales, el ICA-ARG muestra un incremento de apenas 2%, lejos del 5% que proyectaba el Gobierno a comienzos de año. Incluso, el nivel de actividad de agosto fue 0,2% inferior al de diciembre de 2024, lo que confirma que la economía sigue sin reaccionar.

Luces y sombras

Entre los indicadores que marcan el deterioro se destacan la caída del empleo, la baja en las ventas minoristas y la recaudación nacional, que acumula seis meses consecutivos de retroceso. En cambio, algunos sectores muestran señales positivas: la producción agrícola, las importaciones y el patentamiento de vehículos exhiben leves mejoras, aunque insuficientes para revertir la tendencia general.

El desafío para Milei y su equipo es, justamente, recuperar el "timing" político y económico que permita estabilizar las expectativas. La gestión llega al tramo final de la campaña con una economía sin impulso, un frente financiero bajo presión y la mirada puesta en un gesto de apoyo que, desde Washington, podría definir el rumbo de las próximas semanas.


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