Con fronteras cerradas, cómo afecta la devaluación del real

La devaluación de la moneda brasileña en normalidad generaba preocupación por un efecto directo en el turismo. Hoy, a la espera de lo que sucederá con la pandemia y el cierre de fronteras, lo cierto es que Mendoza -sin hacer nada- se volvió un destino más caro.

La devaluación del 5% que registró el real en los últimos días alertó a las autoridades argentinas porque la medida le genera una presión adicional al BCRA a la hora de analizar el tipo de cambio. A la hora de analizar el impacto, en Mendoza en otros momentos una medida podría tener un efecto directo para el turismo, pero en las condiciones actuales todas las miradas se van más a la competitividad de los complejos exportadores.

Una devaluación en normalidad habría implicado que podrían llegar menos turistas porque les significa una encarecimiento de sus viajes al exterior. En las condiciones de cierre de fronteras, implica que una vez que se levanten las restricciones, y se pueda pensar en la llegada de turistas brasileños a Mendoza, la provincia será un destino más caro que en marzo (cuando se pedía la llegada de vuelos desde el exterior) por la pérdida de valor del real frente al dólar.

En 2019, cuando se vivió otra fuerte devaluación del real no había tanta preocupación en otros sectores porque el peso argentino se devaluaba a un nivel mayor, lo que no lo hacía perder competitividad. Sin embargo, ahora la situación es muy distinta.

Según explicó en radio Nihuil el doctor en Economía Pablo Salvador, "nosotros vamos ganando competitividad muy lentamente. El gobierno va deslizando suavemente el tipo de cambio mayorista". Aclaró que eso hace que sea un proceso mucho más lento que el del real, el cual dio un salto de competitividad de golpe.

En ese sentido, dijo que la medida "nos complica porque eso genera un Brasil más competitivo, abarata sus productos a los compradores extranjeros. Entonces a aquel que está afuera le es más barato comprar ahora en Brasil"

Además, el economista dijo que "Brasil va a aumentar sus exportaciones y eso nos complica el comercio con ese país".

Por el otro lado, el análisis indica que para Brasil será más caro importar y eso podría llegar a tener un efecto en los complejos exportadores que tienen como destino el mercado brasileño.

Hasta ahora al BCRA le convenía que el real brasilero se aprecie ya que implicaba que Argentina ganaba competitividad sin tener que devaluar el peso. Ahora, el dólar en Brasil regresa a un máximo desde junio.

Detrás del real se encuentra el sol peruano y el peso chileno, aunque con pérdida de 2,3% cada uno.

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