Energía eléctrica: Un informe de la UBA y Conicet pone a Mendoza entre las provincias más caras del país
Según el Observatorio de tarifas y subsidios de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA y el Conicet, Mendoza está en el top 5 entre las provincias con la tarifa eléctrica más alta del país.
Los datos corresponden al mes de enero, en medio de la transición energética establecida por el gobierno nacional hasta abril del 2025. La factura final promedio más barata a nivel país es de $30.743 pesos y la más alta de $82.175.
En el último informe del Observatorio de tarifas y subsidios de la UBA-CONICET, se puede observar una notable dispersión de precios en las facturas finales por consumo de la energía eléctrica.
La factura promedio total país es de $56.622 para un hogar de altos ingresos(N1), $ 32.116 para un hogar de ingresos bajos (N2) y $38.969 para un hogar de ingresos medios (N3).
Además, el estudio detalla que "al mes de enero de 2025 se encuentra vigente la Resolución 19/24 que determina los precios de la energía entre el 1° de noviembre y el 30 de abril 2025 en todo el territorio nacional, prorrogando los precios mayoristas de la energía, fijados en la Resolución 283/24 de la Secretaría de Energía para el mes de octubre de 2024.
La comparación de los cuadros tarifarios entre jurisdicciones indica que, ante igual consumo, las facturas finales más bajas se encuentran en La Rioja, Santa Cruz y en el AMBA para todos los segmentos de ingresos.
Mientras que, las tarifas más altas para los 3 segmentos de ingresos se encuentran en:
-N1 (Ingresos altos): Neuqúen $82.175 pesos; Rio Negro $78.318 y Mendoza $74.211
-N2 (Ingresos bajos): Río Negrio $54.481; Mendoza $52.604; Tucumán $45.487
-N3 (Ingresos medios): Pto Madryn $61.479; Río Negro $60.730; Mendoza $58.327.
Por otra parte, los datos indican que, para los usuarios de ingresos altos (N 1), la composición promedio de la factura final es del 39% para la energía, 36% para el VAD y 24% para los impuestos.
En tanto que, para los usuarios de bajos ingresos (N2) la composición es del 19% para la energía, 55% para el VAD y 26% para los impuestos; mientras que para los usuarios del segmento de ingresos medios (N3) la factura final se compone un 34% por la energía, 41% VAD y 26% impuestos.