Cómo escapar de la "epidemia de estafas piramidales"

El criminólogo Eduardo Muñoz habló sobre la proliferación de estafas que existen hoy en nuestro país, explicó su funcionamiento y marcó algunas maneras de estar atentos para no caer en ellas.

G. Conte y E. Arguello

En los últimos años en Argentina han tomado mucha fuerza las estafas piramidales, las cuales prometen ,por arte de magia y con una pequeña inversión, hacer millonario a quién entre en ellas. El criminólogo Eduardo Muñoz, quien catalogó este fenómeno como "Ponzidemia", habló con Gabriel Conte y Evangelina Argüello en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y explicó cómo funcionan y cómo estar alertas frente a estas situaciones.

"Creo que es un poco el mundo que vivimos, donde las redes sociales han potenciado el éxito rápido, sin mayor esfuerzo. La gente está comprando ese modelo y quiere sumarse a ese tipo de esquema porque entiende que va a ganar dinero rápido y se va a convertir, sin mayor esfuerzo y sin mucho desarrollo en el ámbito académico, en millonario y va a tener una vida de lujo", señaló Muñoz.

El criminólogo explicó que el fenómeno no es nuevo y que comenzaron hace años con el "telar de la abundancia": "Se trataba de buscar el empoderamiento femenino a través de una unión solidaria que terminó transformándose en un esquema Ponzi y a pesar de que hace más de 10 años no tenían la potencia que hoy tienen las redes sociales, generó muchísimos afectados creyendo que, a través de ese método, podían llegar a cambiar su estilo de vida y convertirse en millonarios".

En referencia a quienes promocionan esto (famosos e influencers), Muños señaló que son, de manera consciente o inconsciente, "embajadores de estos fraudes": "La gente cree en determinadas figuras y los toma como un modelo a seguir: ‘si lo dice fulano, es verdad, debe ser cierto' y lo creen. Estos esquemas utilizan una cuestión de fe, una cuestión de creer que pueden lograrlo fácilmente y la figura de quien lo dice tiene un valor fundamental. Hay diferentes estratos que creen que pueden obtener esa vida de lujo y no necesariamente tiene que ser alguien que de bajos recursos busca salvarse. Creo que lo fundamental en este caso es que aquellos que tienen educación financiera y conocen que este mecanismo de ganancias, con rentabilidades muy altas en corto tiempo, no es posible si no se cuenta con la información necesaria, la formación necesaria para poder generar una inversión sustentable. No soy experto en inversiones, pero cuando a alguien le ofrecen rentabilidad del 7% mensual en dólares, por lo menos desconfiar de que esto no es posible porque en el mercado no existe eso".

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El criminólogo señaló que la educación financiera es una de las claves para poder evitar estas estafas y que la justicia debería encontrar la forma correcta de abordar estos temas: "Es un dilema que se debe plantear la justicia porque en esta viralización de las redes sociales y de promesas de ganancias rápidas, solamente con el hecho de recomendar o de sugerir algún tipo de inversiones, hacen que eso genere una especie de catalizador para que mucha gente crea en ese esquema y la misma gente que va incorporándose al esquema hace que se le pueda pagar a los que primero ingresaron, pero llega un momento que el sistema colapsa porque no hay dinero suficiente para poder cubrir esos aspectos. Creo que la justicia debería plantearse cómo poder abordar estos esquemas porque no solamente generan pérdidas económicas sino también generan trastornos psicológicos, de personalidad, de autoestima respecto a sentirse engañado. Si alguien ha podido ver la serie de Cositorto, él en sus alocuciones y en sus arengas respecto de sus seguidores, plantea muchas cuestiones de fe, incluso asemejándose a líderes religiosos que creían que haciendo determinada cosa podían llegar a acceder al reino de los cielos".

En esa línea, Muños señaló: "Ese contexto de promesas de éxito rápido, cuestiones de fe y de poder llegar a acceder al cielo o una forma de vida que está relacionada con la fe y con la prosperidad, hace que mucha gente termine creyendo en ese discurso y lo defienda a rajatablas. Esas herramientas de convencimiento, de generar la credibilidad respecto de una cuestión y de convicción personal hace que sea muy difícil que las personas puedan llegar a tener el juicio libre como para poder entender que están siendo parte de un sistema que va a enriquecer a unos pocos y va a afectar a muchos".

A su vez, el especialista señaló que es muy difícil poder llegar a quienes están en la punta de la pirámide: "En el caso de Ganancias Deportivas, era una sociedad que se había creado en otro país, con sede en Panamá o en España, sociedades anónimas, donde nadie era una persona visible sino solamente representantes en algunos determinados lugares, que captaban la atención de la gente y ese sistema piramidal se enriquece por la confianza que genera: ‘Yo me metí y estoy ganando, si vos te metés, también vas a ganar'. Y ese que introdujo a cuatro o cinco personas, eleva un escalón dentro de ese esquema piramidal y puede llegar a ganar un poco más de dinero. Es como una ola que una persona la agita y después termina afectando a los que ingresan al final".

Sobre cómo impedir caer en estas estafas, Muñoz marcó que es fundamental educarse financieramente y conocer los riesgos que se corren al ingresar en el mercado: "Los mercados tienen variables propias y hay personas especializadas que se dedican a eso y que trabajan respecto de cómo funciona el mecanismo de los mercados para ganar dinero, lo hacen de forma profesional. Una persona que no tiene ese conocimiento de cómo se comportan los mercados, de cuáles son las inversiones atractivas, cuál es el papel de la política global respecto de algún activo o de alguna inversión, tiene mucho que ver y el común de la gente no lo conoce y cree que poniendo todo su dinero en un esquema va a convertirse en millonario solamente por el hecho de poner dinero y que poniendo ese dinero, lo único que tiene que hacer es esperar que dentro de un par de meses se multiplique por 700. Y eso en la práctica no ocurre".

Finalmente, marcó que todos los que pertenecen al sistema financiero conocen los riesgos y que estos esquemas están pensados sin variables negativas: "Este esquema siempre está pensado en la ganancia al extremo, nunca en que algo va a funcionar mal o que va a existir un contexto global, por ejemplo la guerra de Ucrania que hace que algunos productos bajen sus precios o no se puedan comercializar. En estos esquemas no hay variables negativas, siempre está pensado en que yo pongo el dinero y se va a multiplicar solo milagrosamente", concluyó.

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