Entre el bien y el mal: exjefe de Seguridad del Cartel de Cali cuenta su historia

Cómo se escribe su apellido es lo de menos: Luis Mario del Vasto Cerón ha sido citado por la prensa a lo largo de las últimas décadas como "del Basto", pero él -ocupado antes en otras cosas- terminó, al cabo de esta nota, por confirmar la corrección. Fue mayor del Ejército de Colombia y se pasó al otro lado, a la poderosa y clandestina industria del narcotráfico como jefe de Seguridad de los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela, empresarios de destacada posición en su tiempo y a la vez, capos del Cartel de Cali (1980 y 1990), adversario en los negocios con el de Medellín, liderado por Pablo Escobar Gaviria.

Del asunto narco se ha visto mucho en serie y películas, a la vez que se han publicado decenas de libros con autobiografías, testimonios de sus integrantes o captores, además de la información que ha brotado en los medios de comunicación en torno a los casos concretos. El narco también ha nutrido la ficción y hay puntos en donde se desconocen los límites con la realidad.

El programa "Tormenta de Ideas" en sus diferentes temporadas se enfocó en conseguir los testimonios más contundentes. Este sábado habló con Del Vasto Cerón. Antes, en otras temporadas del espacio radial lo había hecho con William Rodríguez Abadía, autodenominado como "el hijo del Cártel de Cali" y vástago de Miguel Rodríguez Orejuela. También el actor Carlos Villagrán, conocido como "Quico" de "El Chavo", contó cómo rechazó un millón de dólares de Pablo Escobar. Jhon Jairo Velázquez Vázquez, alias "Popeye", sicario de Escobar, dio su primera nota antes de volverse un mediático difusor de sus "memorias". Por su parte, también Hugo Aguilar Naranjo, coronel retirado de la Policía Nacional de Colombia, contó en primera persona cómo mató al líder del Cartel de Medellín.

Audio: Testimonio sobre cómo llevaban cajas con dinero de los narcos a un expresidente 

Este sábado, Del Vasto Cerón ofreció su testimonio personal sobre una vida que transcurrió de los dos lados de la ley, pero en un país en donde hacerlo terminó por ser moneda corriente, a la luz de que reveló los nexos concretos del narcotráfico con la política, como cuando le llevaban cajas con dinero al expresidente Ernesto Samper.

Estuvo preso. Salió y desmiente versiones sobre su papel, interpretado en varias series de streaming y TV. Habló con el programa "Tormenta de Ideas" rodeado se asesores jurídicos y hasta de su asistente literaria (para el libro de próxima aparición) y familiares, mediante Zoom. Su testimonio completo, abajo

- ¿Cómo es que usted hizo clic, un cambio total y pasar del ejército orgánico de Colombia a ser parte de la seguridad del cartel de Cali?

- Uno tiene en la vida tal vez el destino y la ruta a seguir. Soy de las personas que cree eso y la carátula de mi libro prácticamente encierra eso, el círculo de la vida. Por eso se va a llamar "Entre el bien y el mal". Gracias a Dios mi carrera iba por muy buen camino, yo me retiré terminando el curso para teniente coronel. Ascendí ,y faltando cinco días para recibir al grado, ya con todo terminado, decidí retirarme. En ese momento era el oficial más condecorado en combate en las fuerzas militares de Colombia y de pronto por el currículo de la vida militar, de haber pasado por todos los cursos de combate, tuve la invitación de incorporarme a la organización de seguridad de Ardila Lülle Industrial Empresarial de Colombia, pero finalizando diciembre del año '88, apareció un amigo ofreciéndome una labor en Cali. Así fue en enero viaje a Cali y la reunión era con el señor Miguel Rodríguez, que no lo conocía, jefe del cartel de Cali. La oferta fue normal, mucho mejor que la ardila lülle, y acepté. A los dos días está incorporado la organización y me dijo usted no puede ir trabajar en negocios sucios, porque usted va a responder por la seguridad de la familia. Así comencé a trabajar con la organización del cartel de Cali.

- ¿Conocía las actividades delincuenciales de la familia Rodríguez Orejuela o vio la pantalla?

- Normalmente esta pregunta la contesto con lo siguiente: no tenía ni idea. Tú sabes que en el medio y hablando del gran desempeño del clubAmérica, ya que yo soy hincha americano, se hablaba de los Rodríguez banqueros y empresarios. Cuando lo conocí, lo primero que encontró fue almorzando al comandante de la policía de la región. Entonces, ¿qué te indica eso?, que vas a encontrar con un gran empresario. En ese momento yo no sabía de ninguna guerra contra Medellín. 

- Unos meses después incluso hay un operativo, del cual se ha hablado poco, es un intento de asesinato contra Pablo Escobar en la Hacienda Nápoles en coincidencia con la final de la copa libertadores que estaba jugando el equipo de Escobar, el Nacional de Medellín. ¿Usted ya sabía que se dedicaban los hermanos Rodríguez?

- No fue a los meses, fue al mes. Ya yo empecé a enterarme, pero como te digo nunca me dijeron "usted tiene que ir a ayudar a un embarque". Por eso no tengo plata, porque los que tienen plata son los que estaban metidos.

- ¿Qué recuerda de ese operativo en la Hacienda Nápoles?¿Qué pasó?

- Lo que recuerdo es el accidente en el helicóptero. Nos estrellamos por el peso del aparato. Nos metimos en la montaña convencidos por el piloto, pero el peso siempre nos engañó y nos estrellamos casi de frente sobre las rocas. Ahí falleció el piloto, nosotros tres nos salvamos y el resto, lo encontrarán en el libro.

- Iban con el objetivo de asesinar a Escobar.

- Eso no te lo puedo negar. El objetivo de ellos para ingresarme al Cartel de Cali era exclusivamente es un supuestamente para eso. Me buscaron supuestamente por la experiencia de combate, para exclusivamente montar una operación con estos monos para darle de baja al señor Escobar, que era un enemigo pues del país.

 - ¿Era un acto heroico prácticamente enfrentar Escobar de parte del clan de los Rodriguez Orejuela? ¿Qué otros apoyos tuvieron?¿Hubo apoyo exterior?

- Nosotros nos movimos solos, creo yo. Yo soy testigo de eso. Aquí hubo una alianza de los cuatro jefes, por parte del mismo Estado y por parte de la misma DEA. Este señor no pensaba en que murieran inocentes, con tal de demostrar su poder y arrollar un estado o destruir a su enemigo. 

- ¿En su libro usted va a contar también los motivos por los que fue condenado a más de 5 años de prisión por enriquecimiento ilícito? Nos acaba decir que no tiene plata. ¿Por qué lo condenaron por enriquecimiento ilícito?

- No puedo decir que mi institución era el enemigo, pero yo creo que a mí la institución fue la que presionó y obligó para que se me condenara. Cuando a mí me capturaron, con otro personal en la sede del club América, el 13 de junio del 95, no había ningún proceso ni orden de captura. Lo oscuro que realicé, y lo puedo reconocer, fue la operación montada para darle de baja a Pablo Escobar. Pero hubo esa situación por una cuestión muy especial con un compañero de militar, que se originó. Entonces la institución, determinado personaje de mis institución, empezaron a presionar y a perseguirme para hacerme pagar. En ese momento me aplicaron enriquecimiento ilícito por que aparecieron cheques que eran mi pago. Fuera de eso me agregaron otros dineros que figuraban a mi nombre con firma falsa y cédula falsa.

- ¿Qué función cumplió en diciembre del 93 cuando capturan y matan a Pablo Escobar?

- Ese día tenía una reunión con Don Miguel (Rodríguez Orejuela) en sus oficinas. Ya ellos estaban como como, decimos nosotros "corriendo base" y estaban latentes, pues esa operación venía hace mucho tiempo atrás, de Los Pepes atacando con su brazo armado, atacando su parte económica. Había un hombre nuestro allá, en el Bloque de Búsqueda de Medellín trabajando, un ingeniero, un tipo de especialista en el cruce de llamadas para encontrar su ubicación. El rol mío, era simplemente estar con él con el jefe y cuando llegó la noticia fue la alegría. Recibí un regaño de parte de Miguel, porque el señor José Estrada, que estaba ahí, me dice: "Mario ahora vamos a tener poder y nadie nos puede joder", y yo le dijo que no, ahora es donde nos tenemos que cuidar porque los gringos voltean para donde nosotros.

- En ese momento usted ya sabía cuál era el que era el Cartel de Cali.

- Sí, ya habían  pasado cuatro años. Sabía cuál era el rol, pero no tenía idea cómo era el manejo de la parte del narcotráfico.

- A partir de ahí cuando consiguen "darle de baja", como usted, dice a Pablo Escobar usted continúa con él con los Rodríguez Orejuela que tuvieron un periodo de esplendor 

- Sí porque no había situación y ahora había que poner mucha más seguridad porque habían enemigos todavía de ese cartel rodando. Y segundo, lo más seguro y fue lo seguro, así que la DEA tenía todo ese impulso contra Pablo y lo volteó contra nosotros.

- A raíz de lo que sucedió en Haití con el asesinato del presidente se habló de expertos del ejército colombianos. ¿Es normal que personal entrenado por tantos años de guerra interna en Colombia se retire y quede al servicio de agencias privadas?

- No creo que sea una cuestión normal, que esté generalizado, porque vos sabés que la seguridad se ha incrementado mucho en el mundo, en todos los aspectos y más con la cuestión del narcotráfico. Seguridad para evitar el narcotráfico y seguridad por parte del narcotráfico para su actividades. Yo no lo miro como normal, se generalizó mucho de un tiempo para acá. Cuando yo me retiré la empresa seguridad normal existían, pero después unos años veía compañeros retirado o subalterno retirados, que montaban empresas de seguridad y empiezan a hacer estos entrenamientos especiales porque de empresas le requerían personal. Se vino incrementar mucho con la cuestión de Irak y llevar pero nada de esto para apretar protección a las petroleras, los jeques árabes, a esas familias y esas cosas, porque el pago es la remuneración es mucho mejor no.

- ¿Ha mantenido diálogo con los hermanos Rodríguez Orejuela?

- Diálogo, porque tengo una amistad. Y se los digo, y no me da pena decirlo ni me duele decirlo. Son mis amigos. El señor Miguel y Gilberto, ellos me consideran amigo. Soy una persona muy leal pero no tengo contacto. Lo tuve mientras ellos estuvieron detenidos aquí en Colombia. El conocimiento que tengo de ellos es porque mantengo una amistad con los hijos y, con la familia 

- Sobre lo que pasó en las elecciones de Colombia en el 94. Incluso se lo preguntamos a en este programa a Ernesto Samper y él dijo que él no tenía conocimiento de haber recibido financiamiento del Cartel de Cali. Usted que era un amigo de los hermanos Rodríguez Orejuela. ¿Había un vínculo cercano entre ellos y Samper?

-Círculo cercano con Samper yo digo que en un porcentaje altísimo y con la política en Colombia. No sólo ellos, todos. El cartel de Medellín, el de Rodríguez Gacha -alias "El Mexicano"- . Era una relación de negocios, pienso yo. A mí no me vengan con el cuento, yo soy un simple ciudadano, apolítico total, y el señor Samper tenía que saber que existía una amistad, según entiendo de mucho tiempo atrás, desde España. Que a mí me conste, no te puedo decir, pero sí consta ver salir las cajas llenas de plata para el señor Samper. Que algunas quedaron a mitad de camino, tal vez, pero de que él sabía, él sabía. No tengo dudas. El día que mataron a Pablo, contentos me dijeron "Mario, vamos a tener presidente propio".  No me dijo nombre ni nada de esas cosas, pero yo le dije lo dudo, es muy berraco porque ahora los gringos vienen contra nosotros con todo, me imagino que ya venían las pisadas.

-¿Se imagina nueva serie de televisión basada en su libro?

- No no lo hice con esa finalidad. El 70% del libro es mi historial desde que andaba descalzo vendiendo tamales. Es mi vida, es mi vida. Acompañada de unos verdaderos héroes que reconozco yo. Soldados, suboficiales y oficiales que cayeron al lado de uno y que son héroes de mi país. Como el piloto que se mató ahí en el helicóptero. Cosas de esas este es el libro que yo escribo. Está lleno de aventuras, pero reales y normales de un ser humano. De suerte estoy vivo, tengo que contarlas. No he buscado nada especial. Estamos en el proyecto audiovisual desarrollando y arrancó con un par de hijo de ellos que me buscaron. Ellos sabían que se historia la tenía yo de primera mano, la conocía toda porque yo fui el que traje la gente, la preparé y montamos el operativo. Contar mi verdad de primera mano, lo que es normal de un ser humano en su vida. Por eso se llama "Entre el bien y el mal", porque supuestamente estuve en el bien y pasé al mal. Pero no sé si sería a la inversa. Pero eso es lo que todavía quiero descubrir de mi vida.

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