Tensión cambiaria y deuda al alza: claves de un panorama económico que se complica

El panorama económico volvió a tensarse esta semana con la escalada del dólar y la creciente preocupación por la deuda pública. Así lo explicó el periodista especializado Ismael Bermúdez en su columna para Radio Post, donde advirtió sobre la intervención oficial para contener la divisa y el impacto que la salida de dólares tiene en la economía interna.

"Si tenemos que hablar del dólar no es buena noticia", abrió Bermúdez, al referirse a la fuerte suba que llevó la cotización a "1.300, 1.310, 1.315 pesos" en algunos bancos. Según detalló, "el gobierno tomó la decisión de hacer una intervención muy pero muy fuerte para bajar esa cotización pese a que había dicho que no iba a intervenir dentro de la banda de flotación".

Para lograrlo, explicó, se aplicó un aumento de la tasa de interés en pesos para desalentar la compra de dólares: "Elevando muy fuerte la tasa en pesos, de tal manera de que bancos desistieran de seguir apostando a la subida del dólar, se pasaran a los pesos para aprovechar esa altísima tasa de interés".

Bermúdez relacionó esta presión con factores políticos y estacionales: "Estamos prácticamente ya en meses o semanas previas a decisiones importantes en materia electoral", recordó, y sumó que "estamos estacionalmente en un momento donde la oferta de dólares de los exportadores disminuye y en cambio hay una fuerte demanda también estacionalmente por las vacaciones".

Respecto del frente fiscal, el periodista destacó el aumento de las importaciones como "un ancla antiinflacionaria" que, sin embargo, "también tiene un costo económico y un costo social", advirtió. "El empleo registrado del sector privado no levanta vuelo, sigue estancado después de la enorme pérdida que hemos tenido hasta ahora. Hay más de 120.000 puestos de trabajo en relación de dependencia menos del sector privado, a lo cual hay que agregarle otros 50.000 del sector público", precisó.

Sobre la deuda, Bermúdez citó los últimos datos oficiales: "El mes pasado la deuda pública aumentó en el equivalente a 4.300 millones de dólares" y remarcó que esto se debe a que "hay una deuda que genera intereses que no se pagan en forma inmediata, sino que se van sumando todos los meses al capital". De esta forma, dijo, "se paga al final todo junto, capital e intereses".

Este mecanismo, señaló, permite mostrar "superávit" en las cuentas públicas mes a mes porque "ese incremento de intereses que no se están pagando no se lo computa para el resultado fiscal". Sin embargo, alertó que esta estrategia tiene fecha de vencimiento: "A partir del año próximo todo eso se empieza a multiplicar y el 2025, 2026 y 2027 los vencimientos de deudas son muy pero muy elevados".

Por eso, subrayó la preocupación de los mercados: "Los operadores están mirando qué pasa con las reservas... y no se lo ve al gobierno obteniendo eso, porque los datos cambiarios siguen marcando que son más los dólares que se van que los que ingresan".

Finalmente, Bermúdez advirtió que no se esperan correcciones de fondo antes de los comicios: "Me parece que hasta las elecciones hay que olvidarse de que puedan implementarse esos cambios". Y recordó la estrategia oficial de postergar las reformas estructurales: "La apuesta del gobierno es ‘yo voy a las elecciones', lo dijo Milei: ‘Los espero el 11 de diciembre cuando asuman los nuevos legisladores'. Reforma laboral, reforma previsional... están ahí en el primer orden de los cambios que quiere implementar el gobierno después de las elecciones".