Violencia digital: "Hay que volver a decirse las cosas mirándose a los ojos"

La licenciada en Derecho especializada en Criminología Beatriz Izquierdo habló sobre la violencia digital y los peligros a los que se enfrentan los menores al momento de sumergirse en el mundo online.

Conte, Martínez y Fernández

El mundo online da infinidad de oportunidades si es usado correctamente, así como también es un espacio en donde abundan los peligros que acechan a los menores que tienen acceso. La licenciada en Derecho especializada en Criminología Beatriz Izquierdo habló con el equipo de "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y se refirió a la problemática que enfrentamos y cómo afrontar la situación.

"No hay una receta y la solución tiene que venir de la mano de aglutinar esfuerzos. Nos tenemos que poner en marcha porque hemos cometido un error sin precedentes que ha sido entregar un dispositivo con acceso ilimitado a internet a nuestros menores sin medir el alcance de aquello que les estábamos entregando. Ahora mismo estamos viendo consecuencias, en muchos casos desastrosas, que pueden tener para ellos y corresponde aunar esfuerzos. Pero la solución no es única ni puede venir solamente de una institución, no se trata de buscar solo soluciones legislativas. Hay que llevar a cabo importantes campañas de concientización en un primer momento para que los padres sepan lo que pueden estar pasando en sus hogares. Una vez que conozcamos lo que está pasando, ya estaremos mucho más cerca de la solución", señaló Izquierdo.

La especialista señaló que no hay que quedarse con supuestos traumáticos puntuales sino poner el foco en lo importante: "¿Se sienten solos nuestros menores, en un mundo hiperconectado donde las redes sociales nos han enseñado a comunicarnos de otra manera? ¿Realmente un menor no tiene un adulto de referencia al que poder consultarle que se encuentra mal en un momento determinado en un estado anímico y están buscando contacto y consuelo a través de un robot? Son cosas en las que tenemos que trabajar y el momento sociológico que estamos viviendo a nivel mundial exige que hagamos estas reflexiones profundas".

Conferencia: Protección de los menores frente a la violencia digital

En referencia a la soledad, Izquierdo explicó que no es solo cuando una persona no tiene compañía humana a su alrededor: "Hay una soledad que se ha estudiado también desde el punto de vista de la psicología, que la siente la persona que está muy acompañada también. Habrá que trabajar también la autoestima de nuestros menores porque estamos viendo una hipersexualización constante en las redes sociales como no habíamos visto hasta ahora, que nos preocupa, que se disfraza de empoderamiento de la mujer cuando en realidad son simples niñas, muy sexualizadas en las redes. Habrá que trabajar la autoestima de las mismas, no sólo centrándonos en el acceso de los niños a los menores o en culpabilizar la tecnología vamos a encontrar soluciones. Todo esto hay que trabajarlo desde muy distintos prismas y desde luego desde una perspectiva holística con distintos profesionales".

A su vez, la licenciada en derecho señaló que la hiperconexión ha llegado a las familias y que esto es parte del problema: "Muchas veces los padres les estamos diciendo a los niños que no saben hacer otra cosa que estar con un dispositivo móvil, pero se lo estamos diciendo sin levantar la mirada del nuestro, quizás porque en muchos casos estamos trabajando porque son ordenadores de bolsillo. Ha llegado el momento de mirarnos a los ojos, entonar un mea culpa y recuperar conversaciones. Desde luego la familia es lo que va a poder proteger a nuestros menores en primera instancia mientras que esperamos soluciones legislativas que nos puedan ayudar y tecnológicas. La legislación, yo siempre lo digo, es muy lenta y la tecnología es vertiginosamente rápida, entonces mientras que las soluciones legislativas lleguen, sálvese quien pueda".

Sobre la cuestión legal, marcó que el problema es mundial y por lo tanto la solución debe encararse tanto de manera individual como colectiva: "Un delito se puede estar cometiendo a miles de kilómetros de distancia, en el entorno online. Quiero mandarle un mensaje también tranquilizador a los progenitores: educar en el entorno online no debería ser muy distinto de educar en el entorno offline,hay que inculcar valores que tienen que trascender a la pantalla. Si un menor no debiera hablar con un desconocido por la calle porque supone que se puede poner en una situación de peligro, no debería tampoco a través de un chat de un videojuego contactar con un desconocido que puede tener perversas intenciones. En cualquier caso, nuestra mejor arma es la confianza a día de hoy y desarrollar un clima, desde que son muy pequeños, en los que podamos conversar sobre cualquier asunto y que sepan que estamos aquí para protegerles".

Además, Izquierdo comentó que trabajó en el comité de expertos de España y coordinó el grupo de Pornografía, Violencia y Abusos y desde allí recomendaron que se priorice la entrega de dispositivos sin acceso ilimitado a internet: "Teléfonos más analógicos y en cualquier caso más que fijar una edad, lo que tenemos que tener claro es que antes de entregarlos tiene que existir una previa preparación y después de entregarlos un posterior y progresivo acompañamiento como hacemos con todo en la vida: cuando una persona aprende a manejar un vehículo, lleva una previa preparación, de unos estudios, de conocer unas determinadas señales de tráfico, luego lleva también una práctica y aún así cuando uno se saca el carnet de conducir suele ir acompañado, tiene determinada prudencia y además lleva una ‘L' detrás que indica al resto de los conductores que está prácticas".

Finalmente, la especialista señaló que es necesario desarrollar una criminología educativa, que alerte sobre peligros reales y busque soluciones: "Mi proyecto ‘Origen del mal' lo creé con un lema, que es que no podemos defendernos de aquello que no conocemos. Tenemos que conocer que están aconteciendo determinados riesgos en el entorno online, a los que pueden estar expuestos nuestros menores. Si no los conocemos, somos como hace 30 o 40 años esos turistas incautos que podían estar paseando por la ciudad de Nueva York, desconociendo que si se adentraban en la siguiente manzana, podían estar entrando en uno de los barrios más peligrosos del mundo. Hay que conocer el entorno online y hay que conocer los riesgos que están allí, sin desconocer por supuesto también que existen también riesgos que han existido toda la vida y siguen estando allí en el plano físico", concluyó. 

Esta nota habla de: