No hay que apurar la salida del cepo
Mantenemos nuestras dudas de que se produzca un levantamiento de los controles de capital, antes de las elecciones legislativas. El principal riesgo de la actual configuración política es que la balanza por cuenta corriente siga deteriorando.
Creemos que la mayoría de las políticas anunciadas este año tienen y tendrán como objetivo lograr una de las tres condiciones establecidas por el gobierno para levantar los controles de capital.
Sin embargo, seguimos siendo escépticos de que tal levantamiento se produzca antes de las elecciones de mitad de término. El ministro de economía, Luis Caputo, analizó el jueves pasado una reducción transitoria de los derechos de exportación para los principales cultivos y la eliminación definitiva para las economías regionales. Consideramos que esta medida forma parte de un conjunto de políticas destinadas a mejorar rápidamente el balance del BCRA.
El objetivo de Caputo es incentivar las iniciativas de los productores del agro lo antes posible para que el Banco Central pueda adquirir rápidamente estas divisas. La configuración de las tasas de interés también apunta a la acumulación de reservas. El próximo lunes, el ritmo de deslizamiento del tipo de cambio oficial bajará del 2% al 1% mensual.
En cambio, el BCRA ha optado hasta aquí por no bajar más su tasa de política monetaria. Por lo tanto, el rendimiento real de los activos en pesos en términos del dólar oficial será superior al 1,6% mensual o al 19,8% anual, a partir de la próxima semana. Es previsible que este rendimiento incentive las operaciones de carry trade para cualquiera que tenga acceso a las divisas oficiales.
Por ello, el crédito interno en moneda extranjera está en franco alto. Los préstamos en dólares han aumentado en 1.550 millones de dólares en enero, es decir, un 14,3%. Desde septiembre, al comienzo del banqueo, estos préstamos han aumentado 5.280 millones de dólares, es decir, un 74%.
El funcionamiento de estos préstamos implica que el banco liquida las divisas al tipo de cambio oficial en el momento de transferir el dinero al deber. Por lo tanto, esto permite al BCRA comprar divisas adicionales. Mantenemos nuestras dudas de que se produzca un levantamiento de los controles de capital, antes de las elecciones legislativas. El principal riesgo de la actual configuración política es que la balanza por cuenta corriente siga deteriorando.
Un indicador de las presiones puede verse en la balanza del sector turístico, ya que esta se ve menos afectada por las restricciones cambiarias. Aquí, el stock de préstamo en dólares de tarjetas de crédito que muestran alta correlación con la salida de divisas por turismo promedió 615 millones de dólares durante enero. más que duplicándose con respecto al mes anterior y alcanzando su nivel más alto para dicho mes desde 2018.
Además, el potencial de presiones cambiarias derivadas de la política nacional e internacional es otro factor de riesgo a considerar. Por lo tanto, creemos que Milei y Caputo se sentirían más cómodos manteniendo los controles de capital hasta que estos riesgos se hayan despejado.
Mientras continúan bajando más la inflación, intentan mejor la hoja del Banco Central. El personal técnico del FMI podría presionar a favor de una mayor liberalización, pero en última instancia la pelota está en los pies de Caputo.