Esto decía hace tres años Bragagnolo sobre su posible retiro de la política

El intendente de Luján confirmó esta semana que no se presentará a la reelección, dejando el camino allanado a su jefe de Gabinete Esteban Allasino. En 2020 contó a Memo sus aspiraciones personales más allá de la política.

En medio de la cuarentena interminable, allá por noviembre de 2020, Memo inauguró un ciclo de entrevistas vía Instagram, distendidas, donde los referentes consultados contaban cosas más allá de su participación en la política.

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En ese contexto, el intendente de Luján, Sebastián Bragagnolo, quien esta semana anunció que no se presentará a la reelección, dijo entre otras cosas que "todos los días" pensaba en renunciar a la política, entre otras frases que hoy adquieren otro significado.

"Si te digo que no se me cruza por la cabeza todos los días abandonar la política, te miento. A mí se me cruza por la cabeza todos los días. Ser intendente es ser bipolar todos los días; nunca he ido a un psicólogo, pero creo que debería ir", planteó en aquella entrevista de 2020, a menos de un año de haber asumido como jefe comunal.

Explicó Bragagnolo su sorpresiva frase diciendo que "estás totalmente entusiasmado en la mañana porque conseguiste tal obra o solucionaste otra cosa, y de repente te cayeron cuatro reclamos encima, genuinos, pero ese vecino quizás no conoce todo el esfuerzo que uno hace". 

"Entonces, decís 'con qué necesidad estoy haciendo esto' y te dan ganas de bajar los brazos, y te volvés a entusiasmar. Hay que tener mucha vocación para estar en la política porque tiene momentos gratos, pero también ingratos", continuó.

Un extracto de aquella entrevista:

-¿Qué te dejó tu experiencia como diputado nacional?

-Fue una experiencia interesante. En lo personal, me tocó durante esos dos años hacer una maestría y terminaba estudiando los fines de semana, y a la vez acababa de ser padre, y tenía la campaña para intendente en 2019. Fueron de los años más complejos porque me partía en mil pedazos. Cuesta mucho siempre desde los ámbitos legislativos generar cambios. Ahora, como intendente, ejecuto todos los días, tomo decisiones todos los días.

-Susana Balbo, tu antecesora, renunció con fuertes críticas al manejo del Congreso y a la política en general.

-Susana es una persona muy exitosa en lo privado, pero también uno tiene que tener mucha vocación por lo público porque es una actividad que todos los días te pega mucho. Si te digo que no se me cruza por la cabeza todos los días abandonar la política, te miento. A mí se me cruza por la cabeza todos los días. Ser intendente es ser bipolar todos los días; nunca he ido a un psicólogo, pero creo que debería ir. Estás totalmente entusiasmado en la mañana porque conseguiste tal obra o solucionaste otra cosa, y de repente te cayeron cuatro reclamos encima, genuinos, pero ese vecino quizás no conoce todo el esfuerzo que uno hace. Entonces, decís "con qué necesidad estoy haciendo esto" y te dan ganas de bajar los brazos, y te volvés a entusiasmar. Hay que tener mucha vocación para estar en la política porque tiene momentos gratos, pero también ingratos.

-¿Te lo planteás seriamente el hecho de dejar la política?

-Lo he hablado incluso antes de ser candidato a intendente. Cuando decidí serlo, fue una decisión que debe haber tardado al menos dos meses. Yo estaba terminando un MBA en Buenos Aires (de Gestión de Empresas), que a uno le abre mucho la cabeza, pero terminé tomando una muy buena decisión porque lo que estamos haciendo en Luján vale la pena, estamos transformando el departamento con un plan que tiene que trascender a una persona, tiene que ser un equipo que continúe, que tengamos gestiones razonables por 15 o 20 años, como pasó en Maipú o Godoy Cruz. En Luján no ocurrió: hemos tenido buenas gestiones y nos caímos con una mala experiencia. Sentía mucha responsabilidad y que no teníamos que abandonar el camino. Vale la pena.

-En este contexto, ¿te planteás una gestión como intendente de cuatro u ocho años?

-Como intendente tengo un plan de cuatro años, pero un plan de gestión de más de ocho. Necesitamos pasar del intendente que barre y limpia bien, a una gestión que piensa en la ciudad que hay que vivir. Lo estamos transitando en Luján. Nos planteamos que Luján sea el mejor lugar para vivir de toda Mendoza. Que todos los mendocino digan que les gustaría vivir en Luján. Desde allí determinamos los ejes hacia ese camino: revolución del espacio público, programa Luján Sostenible que nos llevará a liderar la parte de sustentabilidad, ordenamiento del territorio, desarrollo económico diversificado, municipio eficiente y centrado en el vecino, y pensar en cómo hacer para devolver más por ese peso que paga el vecino, un Estado más flaco pero más eficiente. Eso tiene que trascender mi gestión. Yo me planteo ser intendente cuatro años, y después yo o quien siga debe continuar ese norte.

-Concretamente, ¿pensás en dejar la política en 2023?

-Sí, siempre lo pienso. Como también pienso en seguir. Cada vez que me lo planteo termino siguiendo. Son decisiones que no me planteo ahora, hoy estoy muy enfocado en entregar lo mejor de mí en estos años, las 24 horas está en mi cabeza la municipalidad.

El video de la entrevista:


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