Daniel Garro: "Los economistas tienen abstinencia de inside information"
El docente se refirió a los datos del REM y también a los economistas que cometen errores al momento de pronosticar dado que ya no cuentan con información privilegiada de adentro.
Así como muchos economistas suelen leer la realidad de manera correcta, otros suelen realizar proyecciones desacertadas de manera continua. El economista Daniel Garro habló con Gabriel Conte en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1 y se refirió al fenómeno de los economistas que tienen "abstinencia de inside information"
"El REM viene teniendo una historia con respecto a errarle a las predicciones desde hace mucho tiempo. Por más que sean consultoras, el gran problema que existe con las cuestiones estadísticas es cuando vos armás estadísticas y no tenés una teoría que lo fundamente atrás, sino que es un mero número matemático, hecho en serie, sin que haya análisis ni teoría por detrás. Ese es el problema que tienen todos los que publican proyecciones o números estadísticos en el REM: en general no tienen una teoría detrás o la que tienen es equivocada. Allí está el problema", señaló Garro.
El economista marcó que a las proyecciones hay que sumarle los cálculos que realizar el BCRA y señaló que estos son "orgasmos estadísticos que no sirven absolutamente para nada": "Cuando a Hayek le entregan el premio Nobel de Economía, que curiosamente se lo entregan junto con un economista keynesiano que se llamaba Gunnar Myrdal y nosotros en la universidad le decíamos "mierdal", en su exposición, que después quedó como un ensayo que se llama ‘La pretensión del conocimiento', ya hablaba del problema de los economistas en lo que significa el mal uso de las estadísticas y las matemáticas, incluso en algunos casos hasta con mala fe. Él decía que se había llegado a un punto en donde se abusaba de las matemáticas y de las estadísticas porque se buscaba en los datos obtener principios y él dice que el proceso es exactamente inverso: son los principios los que tienen que estar primero y a partir del principio económico yo voy a ver en la estadística que ese principio se esté dando".
En esa línea, agregó: "Como decía un gran amigo ya fallecido, Juan Carlos Cachanosky, si la teoría no puede explicar la práctica hay que agarrar la teoría y tirarla a la basura. Esto es muy importante porque si no le hacemos decir a las estadísticas lo que nosotros queremos. Entonces armás todo el proceso al revés y ahí está el porqué de las fallas o el porqué de los pronósticos fallidos y de esta especie de astrología económica de si es 2.4 o 3.7".
A su vez, se refirió a los denominados por el presidente como "econochantas" señalando que muchos de ellos manejaban información privilegiada, además de comentar que ya no asiste a conferencias de colegas: "Vendían ‘inside information', como le llaman en Estados Unidos: llamaban por teléfono al Ministerio de Economía o mandaban a alguien en las épocas en que se iba a obtener información y después te iban a las charlas privadas y te vendían esa ‘inside information', no había análisis. Hay un claro ejemplo hace poco: lo que pasó con Hernán Lacunza, cuando tanto el ministro como el presidente dijeron que él en una charla privada le había dicho a unos empresarios que había podido hablar en el Ministerio de Economía y que le habían dicho en el Ministerio tal o cual cosa referida a posibles devaluaciones y demás".
Siguiendo el ejemplo, marcó que la jugada salió mal ya que uno de los presentes le comunicó lo dicho por Lacunza a Caputo: "Lacunza inmediatamente llamó al Ministerio de Economía para decir que él no había dicho eso y demás. Y el presidente, por supuesto como es su costumbre, lo ventiló al tema, lo expuso, el principio de revelación. Lacunza nunca pensó que algún empresario iba a hacer eso. Eso te demuestra que esto era costumbre: vos llamabas al Ministerio y te pasaban información. Yo esto lo llamo ‘abstinencia de inside information'".
Frente a eso, señaló el problema de los economistas: "El 85% de los economistas, que han salido lamentablemente de las universidades, son todos neoclásicos y keynesianos. Y tienen un gran problema que es la teoría. Entonces te vendían inside information y hoy como no sale nada del Ministerio de Economía o del gobierno, ningún tipo de info, tienen abstinencia. Entonces, tienen que hacer análisis y ahí murieron, porque no tienen teoría o la que tienen es equivocada entonces le van a errar. Antes acertaban producto de tener inside information. Era cuestión de escucharlos nada más, de leer incluso columnas de personas como Lacunza, yo los llamo ‘los Melconian de la vida'. Hoy hay abstinencia, por eso viven errando. Más allá de que no tiene ningún sentido que vos hagas astrología numérica a ver si da 2.3, 2.4. Vos cuando vas a brindar proyecciones económicas, lo que es muy importante es dar la tendencia: ¿qué tendencia va a tener algo? Porque pegarle en el número es hacer astrología y de la mala".
A su vez, trazó un paralelismo con el periodismo, que busca tener primicias en lugar de analizar la información: "Donde más se ve a veces es en el periodismo deportivo, esto de tener la primicia ‘¿quién va a jugar por izquierda?'. Yo digo, ¿cuál es el problema de esperar? Yo recuerdo hace muchos años atrás no era tan importante la primicia sino el análisis de la información. Y en economía es lo mismo: lo importante es que vos agarres la teoría con lo que ha sucedido y veas si la teoría te puede explicar lo que está sucediendo en la realidad más que aciertes en el número que es una simple serie estadística. Lo importante es que luego lo expliques. ¿Cuál es la tendencia de la inflación en Argentina en este momento? A la baja, ok. ¿Por qué está produciéndose a la baja? E inmediatamente después, ¿eso es una tendencia que va a perdurar en el tiempo, no va a perdurar en el tiempo? Ahí tenés que hacer análisis, tenés que aplicar teorías y para eso tenés que saber".
Libre mercado: ¿y los salarios?
Además, Garro se refirió a la decisión del gobierno de no homologar el acuerdo que superaba los límites establecidos: "Lo primero que hay que plantearse es que negocien un sindicato con una cámara de empresarios de comercio un determinado aumento de salario que todos los comercios tienen que aceptar, sí o sí. No hay libertad de negociación salarial de ningún tipo. Las realidades de cada empresa son todas diferentes entonces vos no podés hacer que un sindicato con una cámara negocie y un comercio en Jujuy tenga que pagar el mismo aumento que un comercio en Mendoza o en Buenos Aires. Eso no es libertad de mercado".
A su vez, señaló que no se logró eliminar el monopolio del sindicalismo porque la Ley Bases original fue podada en el Congreso: "Vayamos a la ley original, 675 artículos ¿cuántos salieron? 280, la rompieron todas. Y encima, cuando se quisieron hacer cosas por decreto, la justicia kirchnerista dejaba sin efecto lo que planteaba el gobierno a través de los decretos. No hay libertad de mercado en materia laboral, pero no por culpa del gobierno, sino porque el Congreso no te saca las leyes que vos necesitas para hacer las reformas. ¿Cuál sería eso? En primer lugar tenés que eliminar el monopolio de los sindicatos a través de la matrícula gremial entregada por el Estado para que un sindicato sea tal, algo que viene de la carta del laboro de Mussolini, hay que eliminarlo eso. Ahí recién vas a empezar a tener libertad de mercado porque la empresa no va a tener por qué acatar ese aumento o no. De pronto también podría no pagarlo o pagar más, por ejemplo".
Garro cuestionó el sistema democrático, al cual señaló como una "dictadura parlamentaria" y marcó que hoy el mercado laboral "no es de libertad de mercados ni para los empleados ni para las empresas, es un monopolio de los sindicatos": "¿Y qué dice el gobierno? ‘Bueno, como no hay libertad de mercado y no puedo sacar las leyes, no puedo hacer que las empresas terminen pagando cualquier cosa porque si no me aumenta el desempleo y hasta puede existir que tenga algún pequeño cortocircuito en materia de precios'. No en inflación porque los salarios no generan inflación, lo que genera inflación es la emisión monetaria. Pero sí puede generar cortocircuitos, dado que no hay justamente libertad de mercado".
Finalmente, señaló que la intervención del gobierno es precisamente porque no hay libertad de mercado: "Por lo tanto no van a reflejar un precio de mercado como cualquier otro precio porque el salario es igual que cualquier otro precio. Entonces, como no lo van a reflejar, voy a tratar en lo posible, aplicando la teoría, de intervenir en un mercado que no es libre justamente con el propósito de que se acerque lo más posible a lo que sería una negociación libre entre empresas. Y si los números de precios van camino a que en el año no tengan un incremento mayor a 20-25%, en cualquier negociación de libertad de mercado claramente no tendrías números por encima de eso porque las empresas no lo podrían pagar", concluyó.