Cómo es la India: la experiencia de un argentino en el país más poblado del mundo

El mendocino Gustavo Gallego contó sus experiencias durante su visita al país más habitado del planeta y los prejuicios que se tienen al momento de hablar de él.

G. Conte, A. Martínez, R. Galdeano y A. Fernández
De lunes a viernes de 7 a 10 por Radio Post 92.1.

India es un terreno lejano y desconocido para muchas personas y es por ello que se elaboran muchos estereotipos y prejuicios al respecto. El mendocino Gustavo Gallego habló con Gabriel Conte, Ana Martínez y Ariel Fernández Lavilla en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y contó su experiencia personal al visitar el país más habitado del mundo.

"Yo voy a dar mi visión de lo que fue mi viaje que fueron 15 días y es mi visión, no necesariamente tiene que ser la de todos. India yo creo que está estigmatizada de ser un país muy pobre, pero si uno analiza los datos concretos, lo que podemos ver es que la India tiene una pobreza del 15% y nosotros tenemos un 38%, hasta hace un año teníamos el 50. Es verdad que ese 15% son 250 millones de habitantes, pero es el 15%. Tienen un índice de desocupación del 3%, nosotros casi del 7%", señaló Gallego.

El ingeniero comentó que si es un país caótico y sucio, pero es una cuestión cultural: "Culturalmente ellos no cuidan la limpieza: van caminando con algo en la mano y lo tiran al suelo, no esperan a ver un tacho de basura. Es muy sucio y muy desordenado, pero es una cuestión cultural. Nepal que está a 2500 km es más pobre que la India y está perfectamente limpio. También es desordenado, son países culturalmente en los que el tránsito es caótico y cosas por el estilo. India estuvo bajo la tiranía inglesa durante 200 años y fue saqueada durante 200 años, no lleva ni 100 años de independencia. Sino sería una potencia mundial como lo es China. Así todo, India tiene un edificio en Nueva Delhi de 300 metros, que nosotros no lo tenemos; tiene estadios de cricket para 135.000 personas que nosotros no lo tenemos".

Gallego explicó que en la capital existen autos modernos funcionando como taxis y las principales cadenas de hoteles y señaló que el estereotipo de pobreza que se tiene viene por las personas que viajan: "Tenemos que ver quiénes viajan y quiénes nos transmiten esa sensación. Viaja una clase social media alta porque está a 40 horas de viaje con un pasaje que excede los 2000 dólares; segundo, si pensás quiénes viajan, son personas que van a buscar actividades relacionadas con la espiritualidad, y si pudiéramos fragmentar, generalmente son mujeres. Son señoras entre 40 y 50 años que han pasado su vida del country al cole de los chicos, del cole de los chicos al gimnasio en el mall, del mall al cafecito y del cafecito al cole de los chicos. No conocen El Borbollón, no conocen el Campo Pappa, no conocen el barrio Sol y Sierra y estamos hablando de situaciones que suceden a menos de 10 km. No conocen esa realidad y se horrorizan porque ven chicos pidiendo. Pero si vas a la calle Arístides, todos los días está lleno de chicos pidiendo. Que no tengan contacto con la pobreza, no quiere decir que la India sea un país pobre".

Además, señaló que es notorio que hace 500 años, India era un país extremadamente rico: "El Taj Mahal, que es una obra impresionante, es un mausoleo. Si vas a cualquier cementerio vas a ver un mausoleo y el más importante puede tener 20 m2, el dueño de ese mausoleo tiene una casa que es 10 veces ese mausoleo. El Palacio Colorado, que está frente al Taj Mahal es 10 veces el Taj Mahal. Diez veces más grande, diez veces más ostentoso que es donde vive el rey. Y no tenía uno, tenía tres palacios: uno en Agra, uno en Delhi y el otro en Bombay. India y Asia en general, hace 500 años eran muy superiores económicamente a Europa, que hace 500 años en Europa los castillos eran la casa del tercer chanchito al lado de eso".

En referencia a la seguridad, Gallego señaló que no es un problema en los lugares que él visitó: "Nueva Delhi es muy seguro, extremadamente seguro. Yo salía del hotel caminando, tenía un compañero de viaje que inspira un poco de temor, pero caminábamos por el interior del centro y en ningún momento me sentí inseguro ni a ninguna hora. No hay problema de inseguridad ni en Nueva Delhi, ni en ni en el interior de India, yo fui al interior a ver unas cuevas y no es para nadie inseguro. Sí es muy desordenado: la sensación que da es que es un descontrol, un caos, un desorden total, la gente maneja muy mal. Pero no es para nada peligroso".

Sobre su viaje, señaló que dos cuestiones lo motivaron a viajar: por un lado conocer el Taj Mahal y por otro, unas cuevas maravillosas en el interior del país: "Fui a ver unas cuevas que son las cuevas de Ellora, que son unas cuevas que están talladas en una sola piedra que tienen el tamaño del Partenón. Petra tiene 40 m de ancho, 80 de alto y una profundidad de talla de 3 m. Ellora tiene el mismo ancho, el mismo alto, pero la profundidad son 100 metros. Debería ser una de las siete maravillas del mundo, sin dudas. Además, no tiene explicación científica cómo la tallaron, porque la tallaron en una piedra durísima y es como si lo hubieran hecho con una impresora 3D porque es perfectamente simétrica: si lo partís a la mitad es un espejo de un lado y del otro".

A su vez, señaló que él también viajó con la idea de que India era un país pobre y que la infraestructura le mostró lo contrario: "La casa de gobierno en Nueva Delhi es 100 veces la Casa Rosada, es 100 veces la Casa Blanca. Esa infraestructura, esos edificios, no hablan de un país pobre. Conviven cinco religiones y el Estado hizo un templo para que entren 3000 personas a rezar que no tiene adentro nada alegórico a ninguna religión y lo hace para que entren 2500 personas y todos los días van 10000 personas ahí. Es el templo de la Flor de Loto, es 10 veces el auditorio de Sydney".

Sobre la sociedad, señaló que el 70% de las personas son hinduístas, pero hay un gran porcentaje que no lo es: "El 70% de la gente es hinduista, entonces no comen vaca, pero hay un 30% que sí come, entonces la vaca está industrializada porque el 30% son 450 millones de habitantes que comen carne, que comen manteca, que toman leche, nada es tan así como lo dice, en Nueva Delhi podés ir a comer un bife sin ningún problema. La comida es complicada porque está todo muy condimentado y a todo le ponen salsa: si pedís un pollo te lo traen con salsa. Y todo es picante".

Finalmente, señaló que le gustaría volver, aunque tiene otros destinos previos en el horizonte: "Tengo nuevos destinos donde ir pero volvería. Me queda la Muralla China que quiero ir el año que viene y quiero ver si puedo volver a fin de a Egipto. Egipto es el país que hay que repetir porque es otro mundo. Hay cosas que en Egipto que no tienen explicación y eso a mí me apasiona", concluyó. 

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