Organizaciones educativas, fundaciones y ONG que se autofinancian a las puertas del colapso económico e institucional

La realidad de la que no se habla: instituciones de formación y de ayuda, que están al borde del colapso. El análisis, opinión y propuestas de José Jorge Chade, de la Fundación Bologna Mendoza.

José Jorge Chade
Presidente Honorario de la Fundación Bologna Mendoza

Actividades canceladas y/o suspendidas y reenviadas a fechas a destinar, pasajes aéreos de docentes perdidos, devolución de inscripciones, son estos elementos a los cuales en este momento muchas entidades sin fines de lucro se están acostumbrando y también están pensando a drásticas medidas que hacen tambalear la continuidad de las mismas

Estos son elementos que valen para una Fundación y para tantas otras ONG y asociaciones sin fines de lucro de nuestro país. Este período se está traduciendo en la detención de los motores de sus propias naves, los mismos usados en estos años para realizar cientos de cursos, seminarios y también varios congresos.

Esta carta quiere evidenciar la preocupación de todas aquellas instituciones sin fines de lucro que se encuentran en la misma situación, preocupados del hecho que las medidas en vigor limiten sus actividades, comprensible lógicamente, pero con el consiguiente apagón de sus reflectores en relación a la cooperación para que esto no suceda.

Estas instituciones por más que deseen recomenzar cuando esta situación se normalice, no podrán hacerlo sin un sostén del Estado, considerando que el autofinanciamiento propio no existe, o mejor después de este paréntesis las deudas habrán aumentado. La emergencia que vive nuestro país pone en prospectiva todo esto. Entre cuarentena y dificultades logísticas algunas fundaciones sin fines de lucro, asociaciones y ONG están en un propio "parate", que ha tenido y tiene como efecto no sólo aquello de no poder continuar con sus propuestas formativas, sino también a pensar cuál será el futuro después de estos esfuerzos de tantos años de compromiso social. El cero en las realizaciones de marzo y abril es tal vez el elemento más emblemático de la actual situación.

Cerrar la puertas ahora sería instrumentalizar la pandemia. La idea para "re-partir" podría ser aquella de condividir con el Estado una Escuela Cívica de Alta Formación a la Ciudadanía con informaciones, experiencias y reflexiones sobre el momento actual, con instrumentos de tutela y sostén conjunta para relanzar actividades no sólo para todos los ciudadanos, caregiver, maestros, personas en situación de fragilidad sino también para aquellos que trabajan en el tercer sector, hombres y mujeres ocupados en la administración pública y en las demás instituciones.

Pensando a los criterios de ciudadanía activa, y en este momento de emergencia global además de la importante tutela de la salud en el momento presente el mismo procedimiento deberá adoptarse para el periodo post pandemia promoviendo la educación a la gestión del después, con prevalencia respecto a cualquier otra razón o interés.

Prof. José Jorge Chade

Presidente Honorario

Fundación Bologna Mendoza

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