Netflix, bajo sospecha kirchnerista por el documental de Nisman
El mendocino Mario de Casas, que tras presidir la UCR se tornó "el Durán Barba" del kirchnerismo más duro, escribe hoy una crítica en el portal "El Cohete a la Luna", de Horacio Verbitsky.
Algunos piensan que el documental sobre Alberto Nisman en Netflix deja en claro que se suicidó, ya sea por decisión propia o instigado a hacerlo. Sin embargo, otros piensan todo lo contrario: que reafirma la teoría del asesinato.
Esa es la idea que le quedó al mendocino Mario de Casas, ex titular del Ente Regulador de la Energía Eléctrica tras hacer lo mismo en el EPRE local durante el gobierno de Julio Cobos. De Casas se quedó en el kirchnerismo tras la disputa por la Resolución 125 y hoy es un hombre de consulta en torno a las ideas del sector más duro de esa versión del peronismo.
Escribe habitualmente columnas en "El Cohete a la Luna", el portal de Horacio Verbitsky y su material es profundo y útil, se coincida o no, para abrir debates.
Este domingo, se centra precisamente en Netflix y el documental sobre Nisman, en estos términos:
El aparato comunicacional hegemónico no se toma vacaciones, la tarea de manipular es ardua. La cuestión excede largamente las fronteras nacionales y no es un problema de la época, serían una excepción los pueblos que no lo han padecido desde la finalización de la Segunda Guerra Mundial. Ejemplos recientes de misiles manipuladores de distinta naturaleza y procedencia son:
1. La oportunidad de la proyección por Netflix de la serie del director británico Justin Webster sobre el caso Nisman, punta de lanza de objetivos políticos y económicos concretos, complementada con las correspondientes coberturas distorsivas de la gran prensa local, que insiste en presentar a Nisman como un héroe que fue asesinado y no como alguien que en lugar de cumplir con la alta responsabilidad que le confió el Estado argentino decidió ser un peón rentado en el complejo tablero internacional, y que, según las certezas disponibles, se suicidó.
En torno del quinto aniversario de la muerte del ex fiscal y ante la falta de pruebas respecto de la hipótesis política de homicidio, Clarín y la CIA -el macrismo de paladar negro, apéndice político de la maniobra, la mano de obra desocupada de los servicios, etc.- sobreactúan. Como Carrió, que ha pedido el juicio político de la Ministra de Seguridad por impulsar la revisión de la pericia de Gendarmería; o formulan conjeturas especulativas con el evidente propósito de activar el show para la ocasión, como explica con datos duros y detalles el periodista Raúl Kollmann en la nota La Muerte de Nisman...