Sergio Saracco: El peligro del alcohol al volante y los porqués del consumo excesivo
El médico especialista Sergio Saracco habló sobre los peligros que trae aparejados el consumo de alcohol no solo al volante, sino también en menores de edad. Los motivos del consumo en exceso y cómo trabajar para poder evitarlo.
En las últimas semanas han aumentado los casos de personas conduciendo en estado de ebriedad y el consumo de alcohol en exceso es una problemática instalada en nuestra sociedad desde hace tiempo. El médico especialista en el tema Sergio Saracco habló en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y se refirió no solo a la problemática sino también a las causas que dan origen a la misma.
"Un poco cuando planteamos sobre el tema del consumo de sustancias psicoactivas, hablamos de las legales como es el caso del alcohol o el tabaco, pero también las ilegales que es otra parte del iceberg que no estamos viendo porque no se controla salvo que hayan lesionados y ahí cuando interviene el Ministerio Público Fiscal se hacen los controles toxicológicos de rigor y encontramos que un alto porcentaje también se encuentra conduciendo bajo los efectos de cocaína o cannabis", comentó Saracco.
El médico señaló que el consumo está relacionado con la búsqueda de los efectos que produce en el sistema nervioso central, pero también para aliviar malestares o padeceres: "Yo lo llamo como una automedicación porque el alcohol como sustancia psicoactiva actúa en áreas cerebrales que ayudan y mejoran el estado anímico, causan placer por eso es que uno consume este tipo de sustancias. Pero también tiene un efecto, en el caso del alcohol por perteneces al grupo de las sustancias depresoras, actúan sobre el sistema gaba, igual que los ansiolíticos".
En esa línea, el especialista amplió: "Esto ayuda a calmar o sosegar los estados de angustia, de ansiedad que uno padece y que a veces pasamos a este consumo desmedido en búsquedas de calmar el malestar y lo tomo no porque es placentero o para hacer un maridaje para exaltar los gustos de alguna comida, sino para calmar los malestares que uno siente. Yo creo que esto que estamos viendo es nada más que el termómetro de una realidad: vemos que la persona tiene fiebre, pero no nos estamos dando cuenta que hay alguna patología de base que lo que está llevando a que aparezca esta realidad".
A su vez, explicó que no es lo mismo una adicción que un consumo excesivo: "Cuando hablamos de adicción ya es algo mucho más complejo porque es una enfermedad biopsicosocial, que tiene que ver con la sustancia, pero también con las cuestiones psicológicas y sociales que llevan a la búsqueda de calmar sus padeceres con el consumo de las sustancias. Ahí es donde tenemos que ver qué está pasando, qué se está haciendo para ayudar a la sociedad, que estamos atravesando todas estas situaciones a nivel mundial y a veces también exaltado por lo que atravesamos en nuestro país con las frustraciones, las angustias que llevan a la incertidumbre".
Si bien marcó que no hay estadísticas concretas sobre la incidencia en los accidentes de tránsito, Saracco señaló que el 80% de las personas consumen bebidas alcohólicas: "Otra área que tampoco se aborda que son los menores 18, que ahí se agrega aparte del efecto propio del alcohol el daño que genera en su proceso madurativo, el 70% de los menores de 18 ya consume alcohol, son datos del Observatorio de la provincia de Buenos Aires del 2023-2024. Estos son elementos importantes para tener en cuenta, son aspectos que nos van diciendo que, si la persona consume en este valor, va a estar bajo el efecto del alcohol o bien cursando un embarazo o conduciendo un vehículo, porque no hay nada que alerte que no solamente causa un daño al que consume, sino a su entorno: con el riesgo de accidentología pero también con cambios de comportamiento traducidos en violencia o en otros comportamientos que traen distintos padecedores".
Además, comentó que el próximo viernes estará dando una charla y la idea es intentar comprender que muchas veces nos centramos en la sustancia y no en las situaciones que llevan a ese consumo: "Si lo queremos hacer con algo más práctico es el tabaco: cuando preguntamos por qué alguien fuma, no lo hace porque quiere tener una enfermedad pulmonar o alguna complicación cardiovascular; fuma porque le causa placer, porque le gusta. Esto es comprender cuál es la trampa de estas sustancias, que actúan modulando químicos cerebrales que causan este placer".
Finalmente, Saracco explicó que, en áreas específicas de recompensa, quedamos enganchados con el consumo: "Tenemos que centrarnos en la persona, no en el objeto que es la sustancia y tampoco perseguir el objeto de la sustancia, sino ver cómo podemos contener o ver cuál es el problema que tiene la persona. Hoy nos estamos centrando a veces en objetos, nos encariñamos, y nos olvidamos de lo que es la relación humana. Hoy tenemos un millón de amigos con los likes, pero no sabemos cómo comportarnos con alguien de carne y hueso que tenemos próximos", concluyó.