Fernández, el aborto y el Papa: un obispo mendocino explica el por qué de la reunión

Sergio Buenanueva es mendocino, fue obispo auxiliar de Mendoza y ahora ejerce como obispo de la ciudad de San Francisco, en Córdoba. Explicó por qué el papa Francisco recibió al presidente Fernández a pesar de haber impulsaod la ley de aborto, que rechazan los catóicos y el propio Papa.

Hubo mar de fondo cuando los católicos se enteraron que el papa Francisco recibiría al presidente Alberto Fernández en un primer encuentro luego de que su  propuesta de ley de aborto fuera aprobada por el Congreso argentino.

Si bien algunos medios vinculados a la Iglesia dieron cuenta de que hubo un reclamo formal, un obispo se encargó de formular las aclaraciones que, formalmente, requiere la imagen del encuentro entre Jorge Bergoglio y Fernández que irritó a católicos antiabortistas.

Se trata de Sergio Buenanueva, exobispo auxiliar de Mendoza y actual obispo de San Francisco, Córdoba, además de conspicuo integrante de la Conferencia Episcopal Argentina, y uno de los religiosos con más capacidad (y vocación) se diálogo y mediación de la información más dura de la Iglesia.

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En Twitter analizó por qué esa cumbre sucedió y lo hizo en seis puntos:

- Que el papa Francisco haya recibido al presidente Alberto Fernández en visita oficial no significa ni que sean amigos, ni que apruebe sin más su gestión, por ejemplo, la aprobación de la inicua ley del aborto.

- Si el criterio fuera que el Papa -este o cualquier otro- solo pudiera recibir a jefes de estado de países cuyas normas y organización se ajustaran a la moral católica a la perfección, en la práctica, ninguno podría ser recibido.

- De esa forma, el obispo de Roma, como pastor supremo de la Iglesia, no cumpliría su misión (mucho más importante que ser él mismo jefe de Estado).

- Prevalecería así una lógica de política mundana sobre el Evangelio y la luz que proyecta sobre la política, en su más noble acepción de trabajo, nunca logrado del todo, por el bien común.

- Más allá de sus condiciones personales, un presidente o jefe de Estado representa al pueblo que lo ha elegido o al que preside.

- Vale la pena recordar la respuesta que Pío XII dio a los católicos de EEUU, inquietos por la ayuda que su nación le estaba dando a la Unión Soviética en su lucha contra el invasor nazi: "Ustedes ayudan al pueblo ruso, no a los comunistas".

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