La casta estatal, un político psicoanalizado, concejos en la mira y un empresario que patea el tablero

Qué pasó en la política mendocina en la peor semana del Frente de Todos en el gobierno nacional. Un empresario que pateó el tablero de la legislación laboral, concejales que generan debates, un político que se volvió actor y más datos, con videos, en La Picada del Domingo.

Una actividad solo para empleados públicos. Cada vez más se evidencia desde algunos sectores de la política su lógica (ilógica para el resto de los mortales) de que todo lo que tienen que hacer desde cargos de representación pasa por:

1-  garantizarse seguir en el Estado, en el poder que sea, con el cargo que encuentren;

2- ocuparse solo de cuestiones que involucren a esas 100 mil personas en Mendoza que no son iguales, que tienen "colores" y que trabajan o no, pero que no pueden ser tratados como una masa uniforme. Si "la pegan" allí, creen tener garantizado un importante caudal de votos, como si todos salieran corriendo a apoyar a los legisladores que solo se ocupan de los servicios del Estado para los que trabajan en el Estado;

3- generar sospechas en torno a lo que no son parte de lo que podría llamarse como "la casta estatal", o "la familia del empleado público": quien llegue a un cargo de representación y no provenga de un cargo público, es considerado un forastero, un infiltrado de "el afuera".

El caso alvearense. Lo contamos en Memo (clic aquí para leerlo): en Alvear, un concejal que entró por la lista Cambia Ya de Cambia Mendoza tiene un negocio. Pidió sesionar fuera del horario de comercio, porque si no, tiene que cerrarlo. Tampoco es que sesionen compulsivamente todos los días todo el tiempo, pero le dijeron que no. El bloque peronista argumentó que "hay 6 mujeres concejalas y por las noches deben estar en sus casas". El tema abre un debate, sobre todo, teniendo en cuenta el informe del CEM dado a conocer hoy en el que se nota que solo crece el trabajo estatal y sobre todo, en los municipios. ¡Es que no dejan más alternativa que eso! Pareciera que está organizado a propósito y no que se trate de un error, precisamente.

Cómo las leyes laborales frenan la creación de nuevos puestos de trabajo

Para el diván. Se estrenó anoche en el Teatro Tajamar, en La Alameda (muy buenas empanadas de diversos rellenos en el bar Gregoria, ahí cerca, además de chivo y lasagna) la obra "Bichos muy raros". La particularidad fue el ascenso a las tablas Sergio Miranda, el exsenador, expresidente de la Comisión Bicameral de Seguridad, excandidato a varios cargos y referente de Republicanos Unidos, el partido de Ricardo López Murphy en Mendoza. Memo estuvo allí y comprobó que un político puede hacer reír a la gente y no solo llorar o generar bronca. Nadie tiró tomatazos ni zapatazos. Todo lo contrario. Y hasta hubo una reina en el escenario, sacada del público.

Un breve trato de la obra, que fue realmente muy divertida:

La actriz Jorgelina Flores fue un pilar en el que se sostuvo todo el tiempo el político/actor Miranda. Y la reina que subió fue Marcela Gaua, soberana vendimial de 1988 que estaba en el público junto a su esposo, el exsecretario de Transporte y excandidato a vicegobernador Diego Martínez Palau. Junto a otros integrantes del público fue invitada a subir para interpretar espontáneamente tramos improvisados de la obra.

A sala llena. Miranda y Flores hicieron reír y pensar.

Miranda se deconstruyó en público y hubo mensaje final, pero hay que esperar la reposición para verla, sin spoilear.

Facturas internas. La verificación de que la "unidad" aludida por el peronismo para volver al poder fue algo pegado con mocos (que ya se secaron) quedó en evidencia en la peor semana del Frente de Todos en el Gobierno en su historia, los últimos 7 días. Eso tiene su eco en Mendoza, en donde el peronismo busca puntos de unión en encontrarle problemas al gobierno radical mendocino. Cuando la gestión local deja un resquicio, logra que se unan. Si no, no. Y esa desunión se ve en las actividades de unos y otros sectores, pero también en los concejos deliberantes. 

Por ejemplo, en San Martín la conmoción fue total por el femicidio de Agostina Trigo. Una hija de Alejandro Bermejo apuntó en Twitter a los concejales de su partido de aquel departamento, gobernado por el radical Raúl Rufeil. Cuestionó su actitud (copiamos la redacción textual):

- "El día de hoy, el Concejal Alejandro Ravazzani, en el contexto del femicidio de Agostina, pidio el tratamiento sobre tablas del pedido de informe para exigir conocimiento sobre el funcionamiento de las políticas implementadas por el área de género de la Mun. de San Martín".

- "Diez de los doce concejales decidieron no tratarlo, incluidos los Concejales del frente de todos OSCAR GONZALES y PAULA REPETTO, dejando en evidencia el CINISMO del cuerpo deliberante que se jactan de su preocupación por el femicidio de agostina...".

- "Y por la falta de políticas públicas en materia de género, pero luego encubren la ineficiencia del intendente para trabajar esta problemática.#bastadematarnos".

Y a continuación, mostró el video de lo ocurrido en la sesión:

El hilo de Twitter:

¡Reaccionen! Un empresario quiere sacudir a la política, para que despierte y se dé cuenta de que están para conseguir cambios positivos y no para eternizar los problemas y, de ese modo, venderse como "necesarios" para solucionarlos, cosa que al final, nunca pasa. Fue el constructor Flavio Kristich quien salió con un planteo a los medios, por primera vez (clic aquí para leerlo) , en el que pide una legislación laboral diferente, al menos en provincias que funcionan, con ecosistema no feudal, como Mendoza y otras. ¿Que no se puede? Muchos aseguran que 'si se quiere, se puede'. Y que no es capricho, sino que eso permitiría de inmediato habilitar miles de empleo que hoy se ven trabados por la mirada porteñocéntrica, por las trabas jurídicas y gremiales que juegan para grupos de poder eterno.

Una buena, muy buena. Muchos reculan sobre el rechazo que le dieron al proyecto de Rolando Baldasso cuando era ministro de Obras Públicas de Paco Pérez y propuso un funicular en el Parque para llegar al Cerro de la Gloria. El monumento al cruce de los Ande es un gran mirador, además, y un punto de generación de recursos y multiplicación de la imagen como atractivo turístico de Mendoza (que hoy por hoy, le da de comer a muchas otras actividades) que estaba desperdiciado, desaprovechado. Ahora se piensa que sería bueno algo así, pero no hay plata ni es prioridad, salvo que a algún privado se le ocurra correr el riesgo y conseguir los permisos sin que todo se vuelva una bola política, como cualquier inversión que se quiere realizar en Mendoza.

Pues en la víspera del 9 de julio, Día de la Independencia, el gobierno mendocino desde el Ministerio de Cultura puso en marcha un show creado por un amplio equipo dirigido por Pedro Marabini: "Seamos libres". Se trata de mapping (proyección de videos y luces) sobre el monumento, con música, y que se quedará habilitado "para siempre", como una actividad obligada para lo turistas que lleguen a las Rutas Sanmartinianas de Mendoza. Estuvieron referentes del turismo y la cultura, el cónsul de Chile y el jefe de la Policía Turística, además de gobernador y vice, Rodolfo Suarez y Mario Abed,  el presidente de la Cámara de Diputados, Andrés Lombardi, junto a todo el gabinete, el intendente Ulpiano Suarez y la senadora nacional Mariana Juri. Se lució Nora Vicario, la titular de Cultura, que prometió más actividad allí y otras iniciativas como ésta, para ampliar la oferta turística vinculada a la historia en Mendoza. Todos contentos en la foto de familia:

ALERTA SPOILER: Algunos tramos del espectáculo, en videos caseros. Vale la pena la experiencia presencial, con auriculares en tres idiomas.

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