Elon Musk protagonizó un bochornoso suceso en su empresa con un empleado

En Twitter, nadie tiene su empleo asegurado. Curiosamente, tampoco su despido está asegurado. Porque con Elon Musk todo es posible. Hasta hace poco, Haraldur Thorleifsson trabajaba en la plataforma, pero el domingo pasado abrió su computadora y encontró que él, como otras 200 personas, estaba despedido. Sin aviso.

Elon Musk pone su mirada en el litio chileno

Thorleifsson, sin acceso a sus plataformas de trabajo, buscó durante nueve días una respuesta oficial o una confirmación de su despido. Como no la obtuvo, recurrió a Twitter y pidió ayuda para llegar a Elon Musk, con quien logró tener una conversación insólita que terminó con más preguntas que respuestas.

Musk, públicamente, lo dio por despedido tras acusarlo de ser "rico" y buscar "un gran pago" con la indemnización. Sin embargo, poco después, le pidió que siga siendo parte de un Twitter que se ahoga entre demandas y apagones.

Elon Musk y el despido que no fue

"¿Tal vez si suficientes personas retuitean, me responderás aquí?", escribió el lunes Thorleifsson, quien se hace llamar "Halli". "El jefe de recursos humanos no puede confirmar si soy un empleado o no", agregó, arrobando a Elon Musk.

El CEO de la empresa pidió primero una lista de las tareas que hacía Halli, en pleno Twitter y frente a todo el mundo. Sin embargo, la lista no lo satisfizo. "Fotos o no sucedió", respondió el dueño de Tesla, aumentando la apuesta. Pero no fue todo.

"La realidad es que este tipo (que es rico de forma independiente) no hizo ningún trabajo real, alegó como excusa que tenía una discapacidad que le impedía escribir, pero al mismo tiempo estaba twitteando un montón", dijo Musk en un tweet separado. "No puedo decir que tenga mucho respeto por eso".

Thorleifsson aclaró más tarde que padece distrofia muscular, una enfermedad degenerativa que dice lo puso en silla de ruedas hace más de 20 años. "No puedo hacer trabajo manual (que en este caso significa escribir a máquina o usar un mouse) durante largos períodos de tiempo sin que mis manos comiencen a tener calambres", dijo. "Sin embargo, puedo escribir durante una hora o dos a la vez. Esto no fue un problema en Twitter 1.0, ya que yo era un director sénior y mi trabajo consistía principalmente en ayudar a los equipos a avanzar, brindarles consejos estratégicos y tácticos".

Mientras todo este intercambio sucedía, Thorleifsson dijo a medios estadounidenses que recibió un correo electrónico del jefe de Recursos Humanos de Twitter donde le confirmaba que ya no trabajaba en la empresa.

Una vuelta en suspenso

La catarata de críticas por la respuesta de Musk no tardó en llegar. Algunos se quejaron por la mención innecesaria de la "riqueza independiente" de Thorleifsson, otros apuntaron la falta de conocimiento de Musk sobre lo que sucede en su propia empresa y la mayoría lamentó la negación de la discapacidad del trabajador por parte de Musk, algo que no se vería bien en el documental sobre su vida.

Por eso, tras informarse de la situación, Musk se echó para atrás. "Me gustaría disculparme con Halli por mi mala interpretación de su situación. Se basó en cosas que me dijeron que no eran ciertas o, en algunos casos, ciertas, pero no significativas", tuiteó. "Él está considerando quedarse en Twitter", agregó el magnate.

Thorleifsson, fundador de una empresa de marca digital adquirida por Twitter en 2021, calificó la situación como "surrealista", y le escribió a Musk nuevamente: "Tenías todo el derecho de despedirme. ¡Pero hubiera sido bueno hacérmelo saber!". Por ahora, todavía no dio una respuesta. "Sin embargo, el siguiente paso es averiguar si Twitter me pagará lo que me deben según mi contrato".

Su próximo movimiento será "abrir un restaurante en el centro de Reykjavik muy pronto". "Lleva el nombre de mi mamá", tuiteó.