Punto judicial para IMPSA en su batalla por construir las turbinas para Aña Cuá en Yacyretá

La Justicia argentina ordenó detener las obras de construcción de las tres turbinas que se colocarán en el brazo Aña Cuá de Yacyretá, un contrato de u$s99,7 millones con la firma alemana Voith Hydro. El Juzgado en lo Contencioso Administrativo Federal número 8, otorgó la medida cautelar solicitada por el competidor de la firma alemana, la empresa mendocina IMPSA, que busca quedarse con ese contrato.

La jueza Cecilia de Negre ordenó el freno en las obras, que iban por su etapa inicial en Alemania, hasta que la Secretaría de Energía que dirige el misionero Sergio Lanziani se expida sobre la cuestión de fondo, publicó el diario El Cronista en su edición de hoy.

IMPSA presentó este proceso administrativo cuando perdió con la alemana Hydro la licitación para construir las 3 turbinas de Aña Cuá. En aquel momento, IMPSA (que formaba consorcio con la paraguaya CIE y Power China) ofertó hacer el trabajo por u$s116,4 millones. Voith Hydro, por su parte, propuso hacerlo por u$s99,7 millones y se adjudicó la obra.

Sin embargo, IPMSA argumenta que su oferta tiene mayor contenido nacional y resultará más barata si se empiezan a realizar reajustes en el valor de los contratos, como podría ocurrir ahora con la empresa alemana que por la pandemia afrontaría mayores costos de traslado de profesionales y materiales a la Argentina.

También incide la fuerte devaluación de la que hoy se cumple un año  y que se profundizó con el correr de los meses. Los contratos de la licitación se cotizaron con un dólar más barato en la Argentina. Pero IMPSA argumenta que tiene mayores costos en pesos. (Es decir: hipotéticamente si volviera a cotizar hoy podría hacerlo por menos que u$s116 millones).

IMPSA, Voith Hydro y General Electric son las tres firmas que construyeron en conjunto las 20 turbinas de la central de Yacyretá originales.

IMPSA se quedó recientemente, bajo la gestión del macrista Humberto Schiavoni, con el contrato para renovar 6 de las 20 turbinas, cuyas partes principales están siendo reemplazadas por el desgaste.

En el proceso, IMPSA dejó de ser controlada por el mítico empresario mendocina Enrique Menotti Pescarmona y pasó a ser controlada por un fideicomiso integrado por los bancos acreedores, donde tallan fuerte lo estatales Nación, BICE y también está el BID. Pescarmona controla el 35% del capital pero ya no es presidente de la empresa.

IMPSA tiene su sede principal en Godoy Cruz. Efectivamente, las turbinas de IMPSA (empresa única en Latinoamérica, ni siquiera Brasil tiene una empresa con semejante capacidad e historial en obras hidroeléctricas).

Dejando de lado el reglamento de la licitación que ganó la prestigiosa firma alemana, que IMPSA no construya las turbinas de Yacyretá es un verdadero paso en falso en el intento de desarrollar la industrial local.

Trabajo argentino

En industria pesada, Argentina tiene pocas firmas competitivas con el expertise IMPSA, que a su vez están ávidas de contratos. Argentina, que financia Yacyretá a través de la EBY, tiene pocas obras de estas características para otorgarle a una empresa como la mendocina.

Según la página web de IMPSA, por cada turbina que están renovando para el parque generador antiguo de Yacyretá se emplean:

- Trabajo 100% argentino y fabricación y montaje en obra en conjunto con CIE de Paraguay.

- En Mendoza trabajaron 50 ingenieros, 100 técnicos y 250 operarios.

- Demandó unas 80.000 hs. hombre de trabajo entre diseño hidráulico, ensayo de modelo, ingeniería, compras, fabricación, gerenciamiento, supervisión de montaje y puesta en marcha.

- Dimensiones del rodete Kaplan: 5,5 metros altura, 9,5 metros de diámetro y un peso de 250 toneladas.

Voith y el FMI

Por otra parte, los diarios de Buenos Aires advierten que la revocación del contrato con la firma alemana Voith podría generar cortocircuitos con Angela Merkel y complicar la negociación con el Fondo Monetario Internacional, donde los alemanes tienen casi el 10 por ciento de los votos en el directorio.