Derrotado, Fernández habló de diálogo, de la deuda y descartó un ajuste
Apuntó a una relación fructífera con el Congreso, justo después de perder el quórum en el Senado, entregó una serie de cifras sobre la recuperación y volvió a culpar a la gestión de Mauricio Macri por los problemas que tiene la Argentina en la actualidad.
Después de la derrota electoral de este domingo, que entre otras cosas le significó al peronismo perder el quórum propio en el Senado después de 38 años, el presidente Alberto Fernández dio un discurso en el que apuntó a buscar acuerdos con la oposición, pero apuntó nuevamente a la gestión de Mauricio Macri como responsable de la situación que enfrenta el país.
"Voy a dirigirme a los representantes de la voluntad popular para acordar una agenda tan compartida como sea posible", dijo el mandatario con los números de la elección sobre la mesa.
Apuntando a los cambios que tendrá la conformación del Congreso, pidió "una relación entre el gobierno y el Congreso sea fructífera para el interés general del país".
En mensaje emitido desde Olivos, dijo que la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI) significa el "escollo más grande que enfrentemos para continuar en la senda de la recuperación económica".
Aseguró que "debemos enfrentar este desafío para reparar el enorme daño que el endeudamiento ha provocado y cuyas consecuencias pesarán por varias generaciones".
De esta forma, y luego de entregar una serie de cifras que para el gobierno nacional son un signo de recuperación y crecimiento, descartó cualquier posibilidad de que haya un ajuste, de lo que se desprende que el ejecutivo mantendrá el nivel del gasto público.
"El ajuste fue practicado repetidas veces y sólo profundizo la pobreza", insistió.
Fernández anunció, además, el envío de un proyecto de ley para los primeros días de diciembre que "explicite el programa plurianual para el desarrollo sustentable, con los entendimientos con el staff del Fondo Monetario Internacional en las negociaciones" que lleva adelante Argentina con el organismo "sin renunciar a los principios de crecimiento económico".
"Es una decisión política y tiene el aval del Frente de Todos, la vicepresidenta, el Gabinete", dijo el jefe de Estado en un mensaje en el que reconoció que se cometieron "errores"
