Las Heras, el legado olvidado

"Saber de dónde venimos para saber a dónde vamos", una frase que resonaba en cada acto institucional de Las Heras, que parece haber quedado en el olvido.

Hoy, a 203 años de la partida del General Manuel Belgrano, se hace necesario poner en valor una de sus frases que lo define como un gran prócer de la Patria y estadista, digno de imitar:

"Trabajé siempre para mi patria poniendo voluntad, no incertidumbre; método no desorden; disciplina, no caos; constancia no improvisación; firmeza, no blandura; magnanimidad, no condescendencia".

Está claro que los objetivos delineados por el creador de la bandera son más que plausibles y realizables por hombres y mujeres con vocación de servicio.

Pero cuando uno tiene el propósito y, además es llamado por la ciudadanía a cumplir una responsabilidad institucional, estas palabras toman un valor agregado que debe ser transitado al pie de la letra.

Analizaré estas palabras en un sentido de gestión local y de crisis de gestión e institucional que vive nuestro departamento de Las Heras

Trabajé siempre para mi patria poniendo voluntad, no incertidumbre: Trabajar en la actualidad en Las Heras para brindar un servicio a la comunidad se ha convertido en un acto de rebeldía, aquel que procura llevar adelante proyectos serios y concretos es despedido por no coincidir políticamente con la política coyuntural de turno, propio de gobiernos totalitarios. Ejemplo de ello fue la salida del Secretario de Obras y Servicios Públicos, Ingeniero Bruno FERRARIS quien fue calificado por su propio reemplazante como un funcionario eficiente pero políticamente no alineado. Es evidente el desapego a este gran legado. La eficiencia se traduce en buenos servicios y no hay mejor política que estar alineado con el vecino, ya que, de otro modo, sólo se genera incertidumbre, porque tal cual lo decía nuestro prócer, la voluntad del trabajo no está en mejorar la situación del pueblo sino en satisfacer un capricho personal definido como alineación política.

método no desorden; el método preocupa aquellas personas que no condicen con los principios de la administración: Planeación, organización, dirección y control, ya que los mismos ejes rectores ponderan la transparencia en la gestión y el desafío de llevar adelante políticas públicas claras y concretas. Claramente a los demagogos les preocupa esta forma de gestionar, porque los beneficia el desorden, ya que atenta contra la trasparencia y las buenas prácticas de gestión.

disciplina, no caos; La disciplina parte de lo individual a lo general, cuando quien lidera un espacio lo hace bajo un conjunto de reglas de comportamiento de la ética y la moral, el resto de la organización se rige bajo estas mismas reglas, la destrucción de las mismas solo generará un abismo oscuro y tenebroso. Situación peligrosa para el colectivo gobernado.

constancia no improvisación; Es nada más ni nada menos que esa voluntad a la que nos referíamos, que se convierta en una forma inalterable de actuar, servir al vecino dando certidumbre en su vida diaria, en los aspectos de gestión municipal. No conocer las convicciones, ideales de quien lidera un municipio, invita a la improvisación en su actuar, accionando de acuerdo a la intuición y su visión personal, perdiendo la responsabilidad colectiva.

firmeza, no blandura; Esta premisa fue tomada por otros héroes de la patria, siempre con convicción e ideales, claramente decían "que se rompa, pero no se doble", un ciudadano firme consolidara una sociedad sólida, erigida sobre los valores de la libertad, la igualdad y fraternidad.

magnanimidad, no condescendencia" definición propia de un estadista, que se pone a disposición más allá de lo que sus ojos podrán alcanzar a ver, es el ánimo de avanzar en acciones que procuraran frutos para las generaciones futuras, y no ser condescendiente con lo que la coyuntura del tiempo y el momento quiere escuchar, es procurar un futuro mejor.

Actualmente estos principios se están viendo quebrantados por la codicia, avaricia y sesgo de poder de los funcionarios de turno, su accionar denota que sus convicciones no están alineadas a como este magnificente prócer visiono esta patria, a lo que los vecinos continúan anhelando para su tierra, entonces frente a esto nos preguntamos:

¿Sabrán de dónde venimos? Porque está claro que no saben a dónde van.

Porque de serlo así, les sería más fácil, a quienes desgobiernan el Departamento de Las Heras, conducirse con mayor apego a las buenas prácticas de una gestión, bajo la premisa de continuar con estos valores, hacerlos propios y continuar con los lineamientos que nuestra historia y próceres nos legaron.

Es por esto que la reflexión debe estar orientada a pensar en estas fechas, que aquellos a quienes conmemoramos están más vivos que nunca en su legado.

Simplemente en honor al General Manuel Belgrano, busquen en estas palabras, los funcionarios de Las Heras y particularmente su Intendente, el apego a estos ideales que le permitirán un mejor desenvolviendo institucional, procurando que el pasado, les sirva para tejer el presente y visualizar el futuro.