Promulgaron la ley: ya está vigente el Plan Estratégico de Alfabetización en Mendoza

Se promulgó la ley que se había aprobado en la Legislatura de Mendoza. Crea el Plan Estratégico de Alfabetización. Las claves.

El Gobierno de Mendoza publicó este miércoles en el Boletín Oficial la Ley Nº 9438, que  declara a la Alfabetización como política pública educativa prioritaria en todo el territorio provincial. Esta norma reconoce que la alfabetización es un derecho humano fundamental y una condición esencial para el desarrollo personal y social, así como que es el Estado el responsable de garantizarla.

La ley destaca la importancia de una población alfabetizada y crítica para construir una sociedad más justa, igualitaria y democrática y remarca que, en los últimos años, diferentes evaluaciones provinciales, nacionales e internacionales muestran a Argentina en una situación crítica en términos de habilidades de lectura y comprensión. Por ello se plantea la necesidad de abordar estas dificultades de manera prioritaria, sistemática y sostenida en el sistema educativo.

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A partir de estos considerandos, la ley establece una serie de criterios que el Estado provincial debe garantizar para que el valor de la alfabetización se traduzca en política educativa efectiva. Estos criterios incluyen la formación inicial y continua de los docentes en alfabetización inicial, la especialización de docentes de primer ciclo en alfabetización, la provisión de condiciones materiales adecuadas para el trabajo pedagógico en los niveles inicial y primario, la evaluación formativa y sostenida del Plan de Alfabetización, la evaluación institucional y planificación de acciones de mejora, y el desarrollo sostenido y sistemático de prácticas de alfabetización inicial, lectura y escritura.

Se enfatiza sobre la importancia de la lectura como herramienta clave para abordar los desafíos de la vida en el aula y fuera de ella, así como para el desarrollo de destrezas cognitivas como inferir, relacionar, reflexionar y desarrollar el pensamiento crítico. 

También reconoce la necesidad de diagnósticos precisos y continuos sobre las dificultades de lectura de los estudiantes para abordar eficazmente el problema y menciona el antecedente del 1º Censo Provincial de Fluidez Lectora que sirvió para la detección temprana de dificultades que hay que mejorar. Además, planifica que, a través de los refuerzos de las trayectorias educativas débiles, el porcentaje de chicos con problemas de lectoescritura bajará de casi el 20% al 8% en 2023 y al 4% para 2025. 

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Además, para lograr ese objetivo, la DGE destinará poco más del 2% del dinero del Fondo de Financiamiento Educativo (que envía Nación) para libros, formación docente y, principalmente, para el pago a los docenes que trabajen más horas en las Líneas de Fortalecimiento a las Trayectorias. Se trata de una suma de alrededor de 4.200 millones de pesos. 

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